'Los Irregulares de Baker Street', oda al misterio sherlockiano
Por Pilar M. Manzanares.
Sherlock Holmes se convirtió a lo largo de los años en el personaje más adorado por los adeptos de las novelas detectivescas. Caracterizado con su pipa y su ingenio colosal, se ganó el corazón de mayores y pequeños. Muchos de los secundarios que fueron partícipes del misterio y éxito que siempre rodeó a este detective fueron olvidados. Los Irregulares es un recordatorio de todos ellos.
Pocas veces sucede que un episódico adquiera tanta o más importancia que el propio protagonista. Sin embargo, que lo hagan personajes meramente anecdóticos (no por su importancia en el desarrollo de los casos de Holmes, sino por el lucimiento que de ellos hace Conan Doyle), como es el caso de los Irregulares de Baker Street, es casi un paradigma dentro de la literatura. Los Irregulares son nombrados tan sólo en dos de las historias del canon sherlockiano: “Estudio en Escarlata” y “El signo de los cuatro”; y se da nombre a dos de sus integrantes: Wiggins y Simpson.
Algunas reivindicaciones, casi todas muy meritorias, ha habido de estos personajes sherlockianos. Caracterizados por su fuerza y seguridad en las tramas que van desarrollándose.
Los Irregulares brilla por su astucia e ingenio, engancha al lector desde su comienzo con un ritmo trepidante. La trama, con giros vertiginosos, mantiene la tensión en alto, convirtiendo las horas en minutos.
Alejada de los clones detectivescos a los que estamos acostumbrados, esta novela producida por al editorial Cazador de ratas se aleja de los tópicos, adentra al lector en una historia plagada de emoción. Era necesario dar espacio a unos personajes tan importantes en el canon sherlockiano, figuras que no llegaron a desarrollarse en anteriores obras y que finalmente han alcanzado una centralidad merecida.
Estudio en escarlata fue el inicio de las andaduras de los irregulares de Baker Street. Esta novela estuvo rodeada de polémica porque describía asesinatos entre los danitas (un grupo dentro de la iglesia mormona). El conflicto llegó hata 2011, año en el que el libro fue eliminado de la lista de lecturas para alumnos de 11 a 12 años en Virginia. A pesar de los obstáculos, las narraciones sobre estos excepcionales hombres siguieron en primera línea de la literatura, llegando así hasta nuestros días.
Plumas tan excepcionales como Ángel Olgoso, Elia Barceló, Carmen Moreno, Rodolfo Santullo, Kike Ferrari, Juan Guinot, Mercedes Rosende, Alejandro Castroguer, Cristina Jurado, María Zaragoza y Daniel Pérez Navarro dan vida y fortaleza a lo que antes solo eran ideas inconexas.
Con esta antología, se descubre el mundo de los irregulares, las calles por las que paseaban y los valores que convirtieron a estos hombres en protagonistas de su vida e historias.