El talento de Pía Tedesco en un nuevo show: Envidia de la luz
Por Horacio Otheguy Riveira
Un nuevo show escrito, interpretado, cantado y dirigido con el estilo inconfundible de Pía Tedesco. Generalmente señalamos el estilo de un artista como una marca formidable que se repite a lo largo del tiempo. La Tedesco hace todo lo contrario: no para de renovarse, de buscar nuevas posibilidades sobre un escenario, trabaja muy duro consigo misma, busca en el día a día de la poesía de la calle mancomunada con la poética fascinante de sus colegas del pasado… Y siempre descubre vertientes inéditas de un río caudaloso hecho de imaginación, belleza y profunda ternura, acompañada por músicos excelentes.
Un estreno de Pía siempre es muy estimulante. Viene precedido de alguna información, creemos que bastante, pero una vez instalada junto a sus músicos y ante el micrófono, no más empezar nos conduce por nuevos caminos, por paisajes infrecuentes o alguna vez vistos, ahora plenamente renovados. Ella traduce, escribe, interpreta personajes, y canta en diversos registros con ironía, con cabaretera picaresca… o con una emoción repentina que genera lágrimas en sus hermosos ojos.
Lo último que le aplaudimos en este mismo Teatro Fernán Gómez de Madrid fue La reina del swing, en octubre 2016, y en estas mismas páginas se publicaron estas palabras: Siempre exigente consigo misma, en una rara combinación de artista paciente e impaciente (un cocktail del que surgen maravillas), Pía Tedesco se empeña en una evolución cada vez más teatral e imaginativa. Huye de la monotonía como de una peste, y así, por ejemplo, desde 2014 hasta aquí no hemos hecho más que sorprendernos al compartir con ella noches de incomparable reencuentro con repertorios ya históricos, interpretados en versiones que permiten su renacimiento. Canciones que en su tiempo fueron portentosas expresiones de poetas, presentes en Divas al cabaret y Brecht + Weill = Cabaret. Ahora nos brinda La Reina del Swing: la historia de una cantante de jazz que nos narra su primer encuentro con este estilo, con los artistas de la época, y nos habla de su fascinación por la música y su búsqueda personal a través de ella. Es un espectáculo musical que cuenta cómo los primeros swings y foxtrots sonaron en España para felicidad de jóvenes con las hormonas revueltas, a quienes les estaba vedado tocarse en público y resultaba una odisea tocarse en privado.
Esta vez nos lanza una pregunta para abrir boca: ¿Y si llegas a una terapia de grupo e intentas contar absolutamente todos tus traumas, sueños y mezquindades en una sola sesión? Punto de partida para que Envidia de la luz resulte un juego jazzístico, de humor y psicoterapia, acariciado con el amor incondicional que pone la artista en cuanto hace:
Hay mezcla de canciones que interpretó una artista maravillosa llamada Katie Lee y hay también letras y música original mía e improvisaciones en directo de Sebastián Chames y Chema Saiz, los maravillosos músicos que me acompañan. La primera canción del espectáculo era de las de Katie Lee y se llama “Señor exprimidor”, por lo de estrujarle el cerebro a la gente, como hacen los psicólogos, y en esa canción la protagonista pide ayuda desesperada al terapeuta, ya que siente una envidia descontrolada hacia la LUZ, y hacia nada más.
En una representación envolvente, divertida y siempre emocionante, se suceden situaciones y canciones cuyo carácter es mejor no revelar. Los chispazos de humor ya arrancan desde el comienzo en que muchas maneras de nombrar a los psicólogos y psiquiatras brotan de la boca del personaje interpretado por la actriz: psicoterapeuta, terapeuta, analista, comecocos, psicotilla, hurgatarro, sacatraumas, bochólogo, deschiflador, croquetólogo, salvayuyus…
Sin más detalles, he aquí la letra de la canción central del espectáculo:
ENVIDIA DE LA LUZ
Letra y música: Pía Tedesco
Sé que soy genial
Fuera de lo normal
Original
Nadie me comprende
Soy casi un animal
Evitando lo trivial
Mi mundo espiritual
Lo vulgar trasciende
El reflejo en el espejo
Me tiene en un vaivén
De amor y de complejos
Entre infierno y Edén
Y me pierdo en mis recodos
Me miro desde lejos
Tengo el mango
por la sartén
Yo tengo un sueño
Librarme de esta cruz
Porque yo siento
Envidia de la luz
Yo tengo un sueño
Librarme de esta cruz
Porque yo siento
Envidia de la luz.
Sebastián Chames, pianista y compositor
Habitual en el circuito jazzístico de Madrid. Se ha formado en Nueva York con Barry Harris, Rodney Kendrick, Fred Hersch, Bruce Barth, entre otros.
Todos sus discos han recibido excelentes críticas tanto por el público como por la crítica especializada. Con su proyecto viene tocando en España y Estados Unidos, para ello ha contado entre otros con músicos como Jeremy Pelt, Greg Tardy, Justin Robinson, Gerald Cannon, Dwayne Burno, Willie Jones III, Lamy Strefi Jr, Jonathan Barber, Stacy Dillard, Warren Wolf, Perico Sambeat, Chris Kase, Bob Sands, Bobby Martínez etc.
Chema Saiz, guitarrista y compositor
Es considerado por muchos como una de las voces más singulares y destacadas del jazz español actual.
Descubre el jazz en la adolescencia y en los años 80 recibe lecciones de Sean Levitt, John Abercrombie, Jerry Bergonzy, Dave Liebman, Barry Harris, Jimmy Ponder, Bill Dobbins y Chuck Israels. En la especialidad de guitarra clásica se ha formado principalmente con Jorge Cardoso y Demetrio Ballesteros.
Ha colaborado con: Jorge Pardo, Chano Domínguez, Moisés P. Sánchez, Antonio Serrano, Pablo Martín Caminero, Israel Sandoval, Bob Mover, Jeff Gordon, Charles Schneider, Javier Sánchez, Federico Lechner, Raúl Márquez, Tomás Merlo, Ariel Brínguez, Gustavo Díaz, Borja Barrueta, Antonio Miguel, Martín Leiton, Lou Bennet, FrankLacy, Tony Moreno, Bobby Martínez, Abdú Salím, Dominique Di Piazza, Bill Saxton, Uffe Markussen, Greg Bandy, y reconocidas cantantes como Ángela Cervantes, Eva Cortés, Verónica Ferreiro, y otras muchas.
Teatro Fernán Gómez. Sala Jardiel Poncela. Del 24 al 28 de enero 2018
El 12 de abril 2018, versión concierto en Bogui Jazz