Cadáver exquisito de Agustina Bazterrica
Cadáver exquisito
Agustina Bazterrica
Alfaguara
Novela
Por Juliano Ortiz
Primero, decir que este es uno de las novelas del año 2017.
Segundo, remarcar que en tiempos literarios y artísticos dominados por las historias que ponen al ser humano en los límites de su humanidad, y cuestionando una individualidad que paradójicamente se impone cada vez con mayor fuerza, este libro se sostiene a partir de una trama poderosa, magnética, inquietante. Dicho esto, Cadáver exquisito navega las aguas de lo anti estético, visceral, casi rozando la náusea.
Comiendo de las mismas tierras de la exitosa El cuento de la criada, de Atwood y emparentada con las profecías para Occidente cada vez más vigentes de George Orwell y Aldous Huxley, y en sintonía con las renombradas, Eso no puede pasar aquí de Sinclair y Fahrenheit 451 de Ray Bradbury. De todas ellas se nutre, de todas ellas Bazterrica pasa su mirada para crear una atmósfera que ubica a su personaje principal, Marcos Tejo, como un ícono por donde pasa la reserva moral de una especie llevada a los límites, a donde los dedos se agarran con fuerza del borde, a donde lo que parece imposible, sucede.
Tejo es el encargado general del frigorífico Krieg, labor que no tendría nada de increíble si no fuera porque lo que se faena en ese lugar es carne humana. Esto, que parece una locura, no lo es en esta novela, ya que la aparición de un extrañísimo virus “GBB”, hizo que todos los animales de la Tierra fueran afectados, por lo que todos los gobiernos decidieron matar a los animales y por ende, aceptar el canibalismo como medio de consumo y alimentación. En medio de este panorama, Tejo reflexiona ante lo naturalizado y cuestiona su actitud y la de los que lo rodean, ¿será que la superpoblación es el real motivo de la decisión de los gobiernos para aceptar el canibalismo?
“En esta novela hay desde referencias indirectas a la trata de personas a una representación muy gráfica del canibalismo simbólico y la violencia a la que vivimos sometidos. Y está también en primer plano el tema de cómo objetivamos a otros, les asignamos un valor: aquí hombres y mujeres se comen literalmente unos a otros, hay una traición potencial en todo vínculo. Hoy está naturalizado el consumo de carne animal, pero ¿no es esa también una traición a la naturaleza? Estamos procesando cadáveres en nuestro organismo, ¿y de allí extraemos energía? Lo que nos separa del consumo humano es, acaso, sólo un tabú cultural, aunque como especie parecemos estar alejándonos de ciertos ideales, e incluso valores morales”, declaraba en una entrevista realizada a un periódico la autora.
La novela pone en el tapete la constante del ser humano y su supervivencia, matar y morir, la evolución en un mundo que le es hostil y lo encamina a preguntarse sobre su moral, y la sociedad en la que vive. La autora muestra su fina percepción y expresión de los matices del lenguaje directo –silencio y voz– y de los efectos nefastos de su degradación por el discurso monológico del autoritarismo, político, social o personal. El gobierno decreta las palabras, los nombres, diseña discursos y esquematiza las relaciones humanas.
En definitiva, Bazterrica crea un libro muy bueno, que se lee como una novela que de pronto parece un cuento, y que si tuviera doscientas páginas más también serían leídas con mucho gusto. No me contradigo, solo conceptualizo la excelencia narrativa.
Agustina Bazterrica nació en Buenos Aires en 1974. Es licenciada en Artes (UBA). Ganó el Primer Premio Municipal de la Ciudad de Buenos Aires “Cuento Inédito 2004/2005” y el Primer Premio en el XXXVIII Concurso Latinoamericano de Cuento “Edmundo Valadés” (Puebla, México, 2009), entre otros. En 2013 publicó la novela Matar a la niña (Textos Intrusos), y en 2016, el libro de cuentos Antes del encuentro feroz (Alción Editora). Es gestora y curadora cultural, junto con Pamela Terlizzi Prina, del Ciclo de Arte “Siga al Conejo Blanco” (www.sigaalconejoblanco.com). Coordina talleres de lectura con Agustina Caride. www.agustinabazterrica.net