'El barbero y otros corazones solitarios', de Julia Stuart
Por Haizea Ustaran.
El barbero y otros corazones solitarios es una novela escrita por la escritora Julia Stuart, publicada por primera vez en 2007, bajo el título de The Matchmaker of Périgord.
Julia Stuart es una periodista y escritora británica que ha obtenido varios reconocimientos. Creció en West Midlands (Inglaterra), y estudió francés y español. Después vivió durante un tiempo en España y en Francia, donde trabajó como profesora de inglés. Precisamente a su estancia en Francia se debe su gran conocimiento del contexto social francés, conocimiento que refleja con gran detalle en esta novela como si fuera una francesa más.
Estudió periodismo y trabajó en periódicos regionales durante seis años. En 1999, ganó un premio de la Amnesty International UK Media Awards y en ese mismo año, se convirtió en escritora para el Independent, donde trabajó durante ocho años. Se graduó en un máster en Escritura Creativa por la Universidad de East Anglia en 2013 y actualmente, vive en Londres. Ha publicado varias novelas además de The Matchmaker of Périgord, la novela en la que se centra esta reseña; como Balthazar Jones and the Tower of London Zoo, The Pigeon Pie Mystery y The Last Pearl Fisher of Scotland. Aunque éstas no han llegado a España.
La historia está ambientada en Amour-sur-Belle, un pueblecito de la provincia de Périgord, al suroeste de Francia. En 1999, el pueblo sufrió un mini tornado y todos sus habitantes, convencidos de que morirían, revelaron secretos inconfesables y dieron rienda suelta a sus pasiones más bajas y prohibidas. Pero el tornado pasó y la vida continuó, aunque desde aquel momento todo cambió para los vecinos de Amour-sur-Belle.
Tiempo después, Guillaume Ladoucette, el barbero del pueblo ve como su negocio languidece a causa de un nuevo peluquero en el pueblo de al lado, que le va quitando poco a poco todos sus clientes. Finalmente, se ve obligado a cerrar la barbería y a buscar una nueva forma de sustento.
Un día, pescando con su amigo Stéphane Jollis, el panadero del pueblo, decide que se convertirá en el casamentero de Amour-sur-Belle y en local de la barbería construye “El Deseo de Todo Corazón”, un negocio con el que el desafortunado barbero se convertirá en el casamentero del pueblo y se verá en la tesitura de tener que emparejar a sus complejos y particulares vecinos que, después de lo ocurrido en el tornado, se volvieron aún más complejos y particulares.
La cuestión es, ¿Cómo va a despertar confianza como casamentero si él mismo es un hombre soltero que no fue capaz de corresponder el amor de la mujer de sus sueños cuando tuvo que hacerlo? La respuesta no se hace esperar, puesto que “El Deseo de Todo Corazón” no tiene un gran éxito una vez abierto. Pero poco a poco, más y más habitantes de Amour-sur-Belle comienzan a solicitar los distintos servicios que ofrece el casamentero. Empieza así toda una serie de citas y emparejamientos de lo más variopintos, con resultados ciertamente desastrosos en la mayoría de los casos.
El problema llega cuando Émilie Fraisse, el antiguo amor de Guillaume, regresa al pueblo del que se marchó siendo muy joven tras casarse con un terrateniente local muy rico, pero que la hizo muy infeliz. Una vez liberada de sus ataduras, Émilie regresa a Amour-sur-Belle y se instala en el castillo del pueblo, que constituye, de hecho, el único atractivo turístico del pueblo. Su regreso despierta en Guillaume multitud de sentimientos que el tiempo había relegado a un oscuro y pequeño rincón de su alma. Pero nada más verla, todos los recuerdos y emociones pasadas recuperan la fuerza que una vez tuvieron al calor de aquel amor de juventud que ambos compartieron. Guillaume se dará cuenta de que si no quiere perderla para siempre, deberá sincerarse y confesarle por fin los sentimientos que ignoró veinte años atrás dejándola marchar.
Hasta aquí la historia que contiene el libro. En lo que se refiere al aspecto valorativo, considero necesario realizar una observación respecto al título: El barbero y otros corazones solitarios. A mi parecer es mejorable. En primer lugar, porque ni siquiera tiene que ver con el título original y, en segundo lugar, porque no da pistas realistas sobre el contenido de la novela. Es decir, es verdad que el protagonista es barbero y que su actividad a lo largo de la historia consiste en emparejar a personas que están solas, pero hasta aquí la pertinencia del título. Un título como este augura una novela romántica sumamente cursi. Algo que se aleja totalmente de la realidad.
Tal vez mi dureza sea excesiva, pero un título así provoca que personas no muy afines a este tipo de narrativa rechacen de lleno la novela. Confieso que yo misma, a causa del título, tuve mis reparos dado que el romanticismo novelesco no es en absoluto uno de mis géneros predilectos. Pero me llevé una sorpresa, pues es una novela de gran sensibilidad, en la que si bien la temática principal gira en torno al amor, es mucho más que simple amorío o sentimentalismo vacío y exagerado, pues trata temas como la soledad, la importancia de las decisiones que tomamos, el valor, la sinceridad, la amistad…Además de estar cargada de situaciones inverosímiles y malentendidos diversos, salpicados por toques muy acertados de humor e ironía.
Todo ello configura una historia cargada de humanidad y realismo, en la que con una lectura atenta y abierta es posible adivinar la verdadera complejidad que caracteriza tanto la historia en general, como los personajes y las situaciones que se desarrollan a lo largo del libro.
Además, la cuidada escritura (o traducción) permite que la vista se deslice con suavidad y fluidez por las páginas que la componen, dando lugar a una lectura tranquila y agradable, ideal para pasar un buen rato, aunque sin grandes pretensiones intelectuales. Sin embargo, este tipo de lecturas no están mal de vez en cuando y es que, en realidad, son ideales para descansar la mente. Para esto, El barbero y otros corazones solitarios es la novela perfecta.
Por último, la claridad de las descripciones tanto de paisajes, como de personajes, permiten al lector una profunda inmersión en el espacio geográfico francés de la zona de Périgord, en su ambiente social y por ende, en su cultura, a veces tan distinta de la española o la inglesa.