El príncipe que todo lo aprendió en los libros
Escritor: JACINTO BENAVENTE
Ilustradora: ZUZANNA CELEJ
EDITORIAL JUVENTUD
Fecha publicación: 2017
Formato: 13,5 x 21,5 cm
Encuadernación: Cartoné
Páginas: 92
P.V.P.: 12,00 €
Colección: Juventud
Género: fantasía
Edad: +7 años
Por José R. Cortés Criado
Jacinto Benavente, uno de los grandes dramaturgos del siglo XX y Premio Nobel de Literatura en 1922, escribió esta ingeniosa obra teatral para niños que no ha perdido actualidad.
Su protagonista es el hijo del rey que siempre ha vivido en palacio y ha aprendido todo en los libros, sobre todo en los libros de reyes, hadas, brujas y demás elementos del imaginario infantil.
El rey decide que su vástago salga de palacio y aprenda de la vida real, la reina teme por su integridad si sale al mundo, pero lo hace acompañado de su preceptor y de un guardia, Tonino.
El preceptor se pierde nada más salir porque el libro que consulta le da datos erróneos, y no se atreve a dirigirse a ningún sitio si no tiene la certeza de que es el camino correcto.
Tonino decide seguir un camino, el príncipe se niega, su mundo de fantasía le hace elegir el camino contrario, teme que la mujer que los acoge y orienta sea la esposa de un ogro y se los coma, mientras que el camino indicado por ella como peor y sin destino, será el correcto porque así suele suceder en todos los cuentos que ha leído.
Tras alguna que otra peripecia y otros malentendidos el príncipe supera los obstáculos, según él gracias al hada buena que con forma de pobre anciana lo acompaña y orienta ante toda salvedad; aunque la vieja dice que su sabiduría le viene de su experiencia en la vida a pesar de no ser maga y que el príncipe es un atolondrado que no entra en razones fácilmente.
Bonita historia con su moraleja final que gustará ser leída y mejor ser representada. Como buena obra infantil inspirada en los cuentos de hadas muestra una realidad con pequeños problemas y soluciones amables que intenta simplificar los problemas de la vida en unas simples anécdotas, y mostrarnos que los cuentos suelen ser un espejo de la realidad.