Breviario de saberes inútiles
Acantilado
Barcelona 2016
592 páginas
Un nuevo libro de quien tal vez haya sido el pensador más original y discreto, más inteligente e irrefutable de las últimas décadas. Una obra maestra
Cuenta Simon Leys que cuando era un joven estudiante tuvo la suerte de acudir a una peculiar escuela en Hong Kong. Uno de sus condiscípulos, calígrafo y grabador, la bautizó como «Escuela de la inutilidad», y en ella pasó Leys unos «años intensos y gozosos, en los que aprender y vivir eran lo mismo». Sólo más tarde descubriría el escritor belga que, puesto que el saber más ocioso constituye el fundamento de los valores esenciales de nuestra humanidad, a esos años debía lo más decisivo de su formación. Esta antología de ensayos reúne toda la sabiduría «inútil» que acumuló a lo largo de su vida: en ella se dan cita personajes, imaginarios o reales, tan diversos como don Quijote y el inspector Maigret, Confucio y Mao Zedong, o Magallanes y los náufragos de las remotas islas Auckland. Todos ellos atestiguan la espléndida travesía intelectual del lector voraz que fue Leys, conocedor privilegiado de la literatura occidental y la cultura china.
Simon Leys (Bruselas, 1935 – Canberra, 2014), seudónimo de Pierre Ryckmans, estudió derecho en Lovaina y lengua, literatura y arte chinos en Taiwán. En 1970 se estableció en Australia para dar clases de literatura china, primero en la Universidad Nacional australiana y posteriormente en la Universidad de Sídney. En 2004 fue galardonado con el premio Cino Del Duca. Es autor, entre otros, de Ombres chinoises, The angel and the octopus, Los trajes nuevos del presidente Mao, George Orwell o el horror de la política, así como de una edición de las Analectas de Confucio. Acantilado ha publicado La felicidad de los pececillos (2011), Los náufragos del «Batavia» (2011) y Con Stendhal (2012). Foto: Derechos reservados.
«Qué bien que hayamos encontrado a Leys, que no haya pasado de largo en la noche sin que nos diésemos cuenta».
Ignacio Vidal-Folch, El Mundo
«Placer, inteligencia y variedad».
Félix de Azúa, El País
«La voz de Leys resuena en estas páginas a veces como la voz de un profesor seductor, a veces como la de un intelectual orwelliano y a veces como la de un polemista que conseguía ser al mismo tiempo cordial e implacable. Un libro inagotable».
El Correo
«Leys nunca se ensaña con las personas incultas, demasiado ignorantes para saber lo que hacen. Sus mordaces y certeros dardos apuntan a sus colegas intelectuales, a menudo académicos y en particular especialistas en China, individuos que bailaron al son que marcaba el Partido Comunista en cada momento a pesar de que supuestamente sabían lo que hacían».
Ian Buruma, The New York Review of Books