“La Traviata”: el amor emerge en el Teatro Philips de la Luz
Por María Bravo
Sentía que el Amor es el latido que mueve al universo entero,
misterioso y altivo, cruz y delicia para el corazón
Violetta Valery
Todo París la conoció como Marie Duplessie; Alejandro Dumas en La dama de las camelias, la llamó Marguerite Gautier, el compositor Guisseppe Verdi, la llamó en su ópera Violetta Valery. Sin embargo, su verdadero nombre fue Alphonsine Plessis. Cuatro nombres para una única mujer: la Traviata (en italiano: la perdida), que por pocos días vuelve a la vida en el Teatro Philips de la Luz de Madrid.
Desde muy joven, Violetta experimentó una vida de sufrimiento y pobreza, hasta que decide hacerse cortesana en París. Alcanzó gran fama entre los círculos sociales más prestigiosos de la época, todos la amaban, pero ella era incapaz de amar con mayúsculas. Hasta que conoce a Alfredo. Él es el que puede ofrecerle un amor sin dobleces, pero el padre de Alfredo, descontento con la relación, habla con ella y le suplica que le deje. El joven la ofende públicamente, hasta que se da cuenta de su error y su padre le confiesa la verdadera razón de por qué ella lo ha dejado.
La orquesta Filarmónica Mediterránea (creada en el año 2000), compuesta por músicos europeos y lationamericanos, muchos de ellos miembros de conservatorios profesionales y escuelas de música vuelve a subirse a los escenarios tras el éxito de Rigoletto. Otro triunfo cosechado, después de Carmen, El Barbero de Sevilla o Madamme Butterfly. Por su parte, la compañía Festival Lírico siempre ha sido valedora del gran éxito de crítica y público. Su elenco artístico está compuesto por solistas especialistas de cada uno de los géneros.
En el papel de Violeta destaca la soprano madrileña Idoris Duarte con una gran trayectoria familiar en el campo de la música; en el papel de tenor podemos escuchar el bello timbre del venezolano Carlos Silva. En el papel de barítono, el experimentado Santos Ariño. Un elenco muy bien seleccionado que ya nos conquista desde los primeros minutos con el que en su día fue un éxito músical: Libiamo ne’lieti calici (escena del brindis) con la que es difícil no emocionarse al escuchar cantarla a todos los personajes en el salón del palacete. Una función completa que cuenta hasta con la presencia de un torero y dos zíngaras que bailan al ritmo de la música. Un manjar para la vista.
La Traviata es un éxito hoy, pero fue un fracaso cuando se estrenó en 1853. Esta ópera no era una historia de época, sino contemporánea, hecho que ocurría por primera vez en la historia de la ópera, y pretendía con ella crear un espejo con la sociedad parisina del siglo XIX, donde Verdi les estaba diciendo: “la protagonista es una prostituta y así os comportáis vosotros”. Es más, los actores que se hallaban sobre el escenario, representaban a algunas personas que les estaban viendo. ¿Qué hizo Verdi al respecto tras las críticas recibidas? Tuvo que anclar la historia un siglo antes para que nadie se sintiera aludido.
Hoy en día, esta es la ópera más representada del mundo, una ópera donde el amor melodramático subsana el pasado de Violetta para dar paso a un éxtasis curativo. Ella ya puede descansar de su enfermedad, plagada de amor, de sentimiento, de paz. Una mujer con un único deseo, el de amar y ser amada.
Compañía: Estudio Lírico
Orquesta: Filarmónica del Mediterráneo
Coro: Titular de la compañía
Ballet y coreografía: Víctor Donoso
Director Musical: Fernando Álvarez Catanese
Director de Escena: Jesús Cordón.