Matad al guionista… y acabaréis con el cine, de Alicia Luna
Por Octavi Franch.
Este libro me llegó a las manos un poco por accidente en la tienda de una ONG con la que colabora comprando artículos culturales como libros, cedés, devedés, vinilos, cómics y algún juguete. En breve, también empezaré a mirar ropa ya que llevo unas semanas enganchado a este tipo de compra solidaria; para todos.
Siempre que encuentro un ensayo sobre escritura literaria intento leerlo, ya sea genérico o bien específico por formato y/o género. Como es este caso. No conocía a su autora, Alicia Luna, pero sólo por sus entradas en cada capítulo, y el hecho de que conociera a los principales guionistas y/o directores de España, ya me quedaba claro que era alguien que sabía escribir muy bien, en este caso guiones audiovisuales.
Pues sí: se trata de un libro de entrevistas a guionistas y/o directores españoles de primer nivel, algunos incluso internacionalmente. Con una estructura muy ágil y eficiente, Alicia Luna nos aporta, a través de sus entrevistados, algunas de las claves para poder escribir un excelente guión audiovisual, y más concretamente los de los largometrajes. En el libro, esta profesional de la palabra, escrita con todo tipo de acotaciones, tiene la suerte de hablar con personajes tan relevantes como Joaquín Onistrell, Ángeles González Sinde o Fernando León de Aranoa.
Esta crítica está escrita desde mi vertiente de guionista en particular y como escritor de ficción en general, a fin de resaltar lo que he encontrado adecuado a la profesión y todo aquello con lo que discrepo. Os lo detallo entrevistado a entrevistado, en el mismo orden del libro:
- JOAQUÍN JORDÀ: “Todo puede ser mucho más secreto, menos explícito, menos contado”, página 19.
- CARLOS LÓPEZ Y JOSÉ ÁNGEL ESTEBAN: “De lo que trata la película no debería estar expresado en el guión de ninguna manera”, página 33. “El Objetivo es que él (el espectador) se haga las preguntas que tú te has hecho. Hay que provocarle preguntas. Que no le preocupe lo que va a pasar “, página 35.
- JUAN POTAU: “Si se es guionista es porque se tiene cierta facilidad para serlo”, página 44. … “Para mí lo fantástico es cuando tienes una obsesión y tiras de ella”, página 45. “Sí creo que las historias están ahí y tú haces un poco de médium “, página 46. …” Para mí lo fundamental es haber visto muchas películas “, página 47.
- MANOLO MATJI: …”El argumento debe ocultar la idea, la historia el argumento, el argumento la historia y la película el guión”, página 53. … “Un guión hay que escribirlo contra la historia, y el argumento hay que escribirlo contra la idea “, página 53.” El subtexto es la historia de verdad “, página 54.
- JORGE GUERRICAECHEVARRÍA: …“Lo verdaderamente imprescindible para escribir una historia es estar dentro de la historia”, página 69.
- MANUEL GUTIÉRREZ ARAGÓN: “Siempre digo que lo que escribo no es un guión, sino una película”, página 77.
- ELVIRA LINDO: …”Hay algo que es imposible aprender: el talento para escribir”, página 83.
- LOLA SALVADOR: “Mi método de trabajo es ordenar el caos”, página 107. “Hay que trabajar con presión…”, página 108. “El guión es la película imaginada”, página 109.
- CUCA CANALES: “Intento hacer lo que a mí me gustaría que me hicieran”, página 117.
- SANTIAGO TABERNERO: …”Prefiero no saber muy bien qué va a pasar ni cómo terminará”, página 134.
Y hasta aquí todo lo que me ha parecido relevante en este libro como escritor especializado en guiones audiovisuales.
En cuanto a las cosas negativas, sobre todo una: todos los entrevistados, y la propia autora, durante todo el libro afirman, confirman y reafirman que un guión se tarda muchísimo tiempo (meses, ¡años!) en escribir y que hay que redactar un montón de versiones, incluso realizar trabajos previos como sinopsis, tratamientos, escaletas, etc. Sigo diciendo lo de siempre: yo escribo una única versión de un largometraje y tardo, como máximo, un par de días. No hay manera de que pueda comprender cómo es posible que los supuestos mejores profesionales de este formato narrativo tarden tantísimo en hacer un trabajo que, por lógica, les debería costar muy poco. No lo puedo entender, lo siento.