“La Celia”: retorno de Celia Gámez en la piel de otra argentina brillante: Ivanna Rossi

Por Horacio Otheguy Riveira

Celia Gámez fue un mito de la revista española: a su servicio estuvieron los mejores letristas, músicos, cómicos. figurinistas… y triunfó con un estilo personalísimo, canalla y exquisito, según le conviniera, con acentazo porteño y aires de princesa de andar por casa, y a la vez rompecorazones de armas tomar; era La señora para sus boys and girls (que así se les llamaba entonces), bailarines de ambos sexos que tenían que “matarse” para lograr las duras exigencias de la primera vedette y empresaria.

Atravesó el Madrid de preguerra, bajo la admiración absoluta del rey Alfonso XIII, luego, en medio de la guerra civil, en Madrid, siguió triunfando con revistas de gran popularidad en las que el humor y las mujeres hermosas se rendían a su atractivo singular: una personalidad diferente, una manera de decir y cantar distinta a todo lo conocido y una capacidad de trabajo espectacular. Nunca se rendía, y si exigía muchísimo al ballet y a los numerosos artistas y técnicos que la acompañaban, ella era la primera en llegar, siempre dispuesta a echarle horas a un trabajo muy difícil: administrar bien las posibilidades comerciales en teatros que llenaba habitualmente, pero que no tenían miles de butacas y había que hacer muy bien las cuentas; bailar y cantar, dirigirlo todo, desconfiada y autosuficiente como buena diva que se retiró, ya mayor, en plena agonía del Generalísimo.

Mucho tiempo después regresó, ya octogenaria, en 1984, en un espectáculo producido por Pepe Tous, marido de Sara Montiel, junto a Olga Guillot y la propia Sara: cada una un tiempo solitario en escena. La anciana Celia ya no tenía boys and girls, y resultaba patética con sus trajes revisteriles en un cuerpo rechoncho de abuelita con el micrófono pegado a la boca, pero el patetismo se disolvía en cuanto empezaba a cantar sus  emblemáticas canciones con un deje pícaro incomparable.

Celia Gámez, porteña enamorada de España y encariñadísima con Madrid, donde cosechó sus mayores éxitos y amores, estrenó numerosos temas muy españoles, como El beso, de Adrián Ortega/Fernando Moraleda; El Chotis del Pichi, de González del Castillo/Muñoz Román; Pasacalle de los nardos, de González del Castillo y Muñoz Román/Francisco Alonso; o el célebre Viva Madrid, de Arturo Rigel y Francisco Ramos/Francis López, entre muchos otros.

Fue un personaje que abarcó todas las épocas y en todas brilló con personalidad propia, coqueteando con todas las tendencias políticas, de las que salió indemne, regresando a su Buenos Aires natal a morir a la edad de 87 años.

Este espectáculo-homenaje, La Celia, tiene a su favor el talento de una cantante-actriz espléndida, Ivanna Rossi, por voz, sensualidad, picardía y precioso cuerpo. Sin embargo, teniendo tanto, le falta el punto canalla de la Gámez: ese estilo tan suyo barriobajero, con segundas, dispuesto a todo con tal de conseguir lo que se propone, y a la vez dulce, embriagador (como puede verse en este vídeo de
Me voy o no me voy, su última época, con temas que en este espectáculo también se cantan).

Son estupendos los músicos en directo que acompañan los números musicales, y resulta magistral, como siempre, el trabajo de diseño de vestuario de una experta como Renata Suchssheim (también diseñadora de la estupenda versión de La viuda alegre estrenada en la Sala Roja de los Teatros del Canal).

A pesar de sus muchos aciertos, La Celia a la que se rinde homenaje es mucho personaje para tan poco espectáculo de sólo hora y veinte donde se pasa por alto su compromiso con el franquismo, tras una boda espectacular en la que fue testigo el monstruoso fascista Millán Astray, de la que la Gámez en sus Memorias se burla y se burlan en este espectáculo, por su deformidad física y no por su enaltecimiento de la barbarie con aquel ¡Viva la muerte!

En definitiva, un espectáculo brillante casi siempre, monótono a menudo, y pobre de contenido con un guión pobre ante una personalidad que le supera ampliamente por su talento y sus contradicciones. Fue quien cantó el Hemos pasao, como respuesta al No pasarán de la canción madrileña republicana en plena contienda, y aquí se presenta como una “arrepentida” de aquella burla feroz a los perdedores de una injusta guerra civil, en una visión de sí misma increíblemente generosa.

En plan de divertimento ligero (que es, al fin de cuentas, lo que siempre representó la Gamez), este show de La Celia brilla con luz propia. Si se quiere más, el espectador se encontrará con las manos vacías, ante un texto que pasa de puntillas por la historia de la única gran diva de la revista española con fantásticas luces y negras sombras: un contraste que merece un tratamiento más profundo.

La Celia

Autor: Santiago Castelo

Intérprete: Ivanna Rossi

Bailarinas: Olivia Juberías, Begoña Álvarez, María López, Elsa Álvaro

Piano: Rosalí López/ Javier M. Carmena

Violín: Javier Aznárez/Ángel Boti

Contrabajo: David Sánchez

Dirección musical, arreglos y música original: Jordi López

Idea y producción artística: Lino Patalano

Dirección: Emilio Sagi

Teatros del Canal. Sala Verde. Hasta el 28 de febrero de 2016

Retorno a España en gira 2017

ALBACETE

13 de enero a las 20 h.- Teatro Circo

Venta de entradas: http://www.teatrocirco.es/musical-la-celia

 

MURCIA

14 de enero a las 21 h.- Teatro Circo

Venta de entradas: https://www.mgticket.com/teatrocircomurcia/public/janto/main.php

 

MADRID

16, 17, 23, 24, 30, 31 de enero & 6 y 7 de febrero a las 19 h.

Teatro Marquina /// Venta de entradas: https://compra.teatrosdemadrid.com/janto/?Nivel=Evento&idEvento=CG

 

TORREVIEJA

20 de enero – Teatro Municipal

 

VILLENA

21 de enero a las 20 h. – Teatro Chapí

Venta de entradas: https://www.instanticket.es/description/?id=2199&site=410&b=1

ALICANTE

22 de enero a las 18 h. – Teatro Principal

Venta de entradas: https://www.instanticket.es/description/?id=2374&site=414&b=1

 

SORIA

4 de febrero – Teatro Auditorio Palacio de la Audiencia