¿Con qué sueñan las mujeres?
Por Marvic Otaiza
En 1948 la fotógrafa de origen alemán Grete Stern comienza a colaborar con la revista argentina “Idilio”, dando forma visual a las cartas que las lectoras envian a una de sus secciones dedicada al psicoanálisis. La interpretación literaria corre a cargo de Gino Germani, fundador de la sociología moderna en Argentina, y Enrique Butelman, editor de Paidós, una de las empresas pioneras en difundir esta disciplina en lengua española.
A través de sus fotomontajes Stern ofrece una visión crítica sobre los valores de la condición femenina. Imágenes míticas de un mundo soterrado tras la máscara de la represión, la sumisión autoimpuesta y la conveniencia social. Un total de 150 trabajos únicos y revolucionarios influenciados por el Dadaísmo, el Surrealismo, la Bahaus, el psicoanálisis y la vanguardia feminista surgidos en el seno de la heterogénea cultura porteña.
La importancia de la subjetividad femenina y la búsqueda de un sentido a la existencia orbitan en estos sueños representados con laboriosidad artesanal. Cambios de proporción, sobreimpresión de imágenes, detalles amplificados y perspectivas inverosímiles convierten sus trabajos en objetos visuales al estilo de los ready-mades de Duchamp. Recreaciones de situaciones maravillosas y significativas que las corrientes surrealista y dadaísta se esforzaron por descubrir tras la cotidianidad.
“Para mí la imagen más fuerte es la que presenta el mayor grado de arbitrariedad”
André Breton
Su lenguaje onírico contiene tanta energía psíquica que nos vemos obligados a prestarle atención. Y es en el deber ser femenino consagrado por la cultura dominante donde la artista nos sitúa. Sueños de encarcelamiento, ambición, evasión, libertad, fracaso, dependencia o dominación son sólo algunos de sus anhelos. La mujer en situación de conflicto ante sus ideales frustrados. Utensilios domésticos con dimensiones gigantescas, conciertos para piano sobre máquinas de escribir, personajes femeninos como objetos manipulables y manipulados, piezas de ajedrez, artefactos, herramientas con funciones y espacios predeterminados. Humillaciones ante las cuales la mujer actúa con complaciencia servil bajo la mirada irónica y compasiva de los valores patriarcales. Su discurso también contiene una crítica a la alienación femenina en la naturaleza sofocante de la familia tradicional. El hogar burgués como escaparate de individuos viviseccionados, como prisión elegida. Cuestiones morales profundas y decisivas narradas con una fuerza plástica y visual sin precedentes.
Los sueños son los encargados de reestablecer el equilibrio psíquico produciendo material onírico a partir del envío de mensajes instintivos, esenciales para la mente racional. Su simbolismo muestra en la obra de Stern la existencia de una disociación emocional masculina vinculada a la cosificación de la mujer y es en su coincidencia con lo socialmente valorado donde nace el conflicto. Stern señala en sus obras la parte oscura que habita en las mujeres, lo irracional como éxtasis místico, la construcción de la subjetividad femenina en lo sagrado y lo mágico. Su reconocimiento y valoración aún están en camino.
Grete Stern Sueños
Círculo de Bellas Artes – Sala Minerva
Alcalá, 42
28014 Madrid
Hasta el 31 de enero de 2016