La Pegatina como terapia
Por: Marisa Nocea
Que La Pegatina esté encima de un escenario es sinónimo de fiesta. Esto no es ninguna novedad, ya que el grupo catalán lleva muchos años dejando claro que son unas de las bandas que mejor lo hacen pasar al público. Tanto si es tu tipo de música como si no lo es, no hay persona que no disfrute en sus conciertos, y las sonrisas en las caras de los asistentes a la salida del evento lo confirman. No se si son las canciones, la energía que desprenden o el confeti, el caso es que sirven el cocktail perfecto para crear un ambiente de diez.
El pasado jueves 8 colgaron el sold out en la madrileña Sala BUT, acompañados de los argentinos Los Caligaris. Estos comenzaron alrededor de las 21:00h ante una sala llena que no quisieron perderse lo que la banda argentina tenía preparado. Cualquiera que desconciera el tema hubiera pensado que los allí presentes estaban ante su banda favorita, ya que desde el primer momento todos votaban al ritmo de temas como Todos Locos, Estanciera o Que Corran como si del cabeza de cartel de festival se tratase. Anunciaban que era su primera vez en Europa mientras iban terminando camisetas en mano para calentar aún más el ambiente. Esto iba definiendo la actitud con la que el público hacía frente a la noche del jueves. Tras un despliegue de energía y un cartel de “Muchas gracias” con los colores propios de su país, los argentinos dejaban el escenario para dar paso a los autores de “Revulsiu”.
Alrededor de unos 30 minutos tuvieron que esperar hasta ver a La Pegatina. En cuanto salieron, no había persona en el local que pudiera estar quieto ante la puesta en escena de los catalanes, ya fuera dándolo todo en el pogo que se formaba de mitad de la sala en adelante o los bailes entre amigos de los asistentes más tranquilos. Hicieron un repaso por toda su discografía, tocando desde temas más antiguos como el de ¿Cómo explicarte?, perteneciente a “Al Carrer” (2007) hasta algunos de su último trabajo, como por ejemplo Celestina, tema en el que colabora Rayden y que el propio rapero quiso estar presente para cantar en el escenario. Pero la aparición de Rayden no fue la única, ya que contaron con invitados de gran calidad como El Canijo de Jerez, El Niño de la Hipoteca o Pipo Ti. Algún que otro problema con el micrófono de los invitados pasó desapercibido gracias a la gran puesta en escena de todos ellos.
Faltaban diez minutos para la medianoche cuando llegó el momento de presentar a los miembros del grupo y que, en su línea, también fue un espectáculo en sí mismo. Salieron del escenario mientras el público coreaba “¡No estamos solos, falta Mari Carmen!”, en alusión al popular tema. Unos minutos después estaban de vuelta para satisfacer al personal. Invitaron al escenario a Los Caligaris para concluir con Mari Carmen el magnífico concierto que habían ofrecido.
El directo de La Pegatina es una de esas cosas que por mucho que se expliquen, no puedes percibir la magia de sus conciertos hasta que estás presente. Un show que podría ser terapéutico de la felicidad que es capaz de provocar a todos los que lo viven.