«Stomp»: danza, acrobacia, percusión y muy buen humor sin palabras
Por Horacio Otheguy Riveira
Ya superan los 24 años en la cresta de la ola dando vueltas por el mundo, en cada país una compañía diferente. Nada menos que 22 años en una sala de Nueva York y 13 en Londres, la gran capital del teatro mundial. Ahora en Madrid en un flamante teatro Calderón. Y todo bajo una sola palabra mágica que hace la delicia de un público entusiasta de todas las edades: Stomp.
Aunque numerosos espectadores festejan este espectáculo de casi dos horas de intensidad asombrosa, aún hay gente que piensa que Stomp abruma con tanta percusión, pero nada más lejos de la realidad.
Son 8 artistas (6 hombres y 2 mujeres) capaces de entusiasmar con el mayor de los susurros escénicos, como es la danza de los cepillos, y poco después con un concierto a base de cajas de fósforos. Ahí es nada: lo hacen todo, navegando como dioses en el Olimpo de los sonidos que componen música con los objetos de andar por casa —y de andar por la calle—, todos ellos extranjeros sin decir ni una sola palabra en castellano, ni siquiera el tradicional de hacernos la pelota con «Gracias, Madrid».
No todo es percusión asombrosa en su variedad de estilos, pues va acompañada de un esfuerzo físico sobrehumano, ya que son bailarines-acróbatas excepcionales, con el «extra» de un voluminoso compañero, tan alto como entrado en carnes, que no para de reírse de sí mismo.
La danza de los cepillos que barren el suelo y el tamborileo de las cajas de fósforos se integran en un desfile de situaciones donde, con mucho sentido del humor, estos 8 artistas que parecen de goma trabajan dando la impresión de total improvisación. Pero para que esto sea posible se necesitan muchas horas de trabajo, pues en todo momento dan muestras de una precisión impresionante.
Todo medido, elaborado hasta el último detalle, de manera que el entrelazado de sorpresas nos alcancen hasta una despedida que los espectadores prefieren que no se produzca. Tan grande es el entusiasmo que despiertan que no paran de aplaudirles.
Se atreven con los objetos más insólitos, como crear un concertino fabuloso con fregaderos cargados de agua y cacharros de cocina, dando lugar a un vaivén de sonidos envolventes mientras ellos se provocan un divertimento extra salpicándose e impactando con un broche de oro que invita a la carcajada.
Varias veces hacen participar al público desde su butaca, y todos a una formamos parte del show descubriendo las posibilidades infinitas de las palmas de nuestras manos y de las manos en los muslos y de las piernas en el suelo… Nada escapa al despliegue de virtuosismo y alegría de este Stomp que también juega con tubos de goma de diferente tamaño y grosor, neumáticos gigantes que simulan ser barcas a la deriva en un mar de melodías…
Lo asombroso es que hasta descubren musicalidad en hojas de periódico o en mecheros alternos en medio de la oscuridad del gran escenario. Y desde luego no se pierden el gran concierto con las tapas de contenedores y otros objetos metálicos adheridos a una pared con los intérpretes moviéndose en el aire, bien asegurados como albañiles en lo alto de un edificio.
Esta muestra única de percusión, movimiento y comedia visual que es Stomp nació en el verano del año 1991 en Brighton (Reino Unido) de la mano de Luke Cresswell y Steve McNicholas, que habían trabajado juntos ya en los años 80 haciendo comedia musical callejera. La idea fue concebida originariamente por Cresswell como parte del espectáculo de una banda sobre el escenario, sin poder imaginar que estaba creando un fenómeno mundial hoy conocido como el dustbin dance (el baile del cubo de la basura) y creando una nueva categoría de espectáculo sin fronteras.
Lleva 24 años girando por todo el mundo. Ya se han superado las 20.000 representaciones, con más de 12 millones de espectadores en 53 países. Actualmente hay cinco compañías: una recorre Europa, otra América del Norte, una tercera en gira por el resto del mundo, otra en Nueva York (22 años consecutivos de éxito) y otra en Londres (¡actualmente en su décimo tercera temporada consecutiva!). Un total de 90 artistas integran estas cinco compañías.
Hasta el domingo 13 de septiembre en el hermoso Teatro Calderón recientemente restaurado.