Un Territorios diferente
Por: Marisa Nocea
Para saber que la 18º edición del Festival Territorios iba a ser algo distinto a lo que estamos acostumbrados no hacía falta ni asistir: celebrado en junio, cartel, dos escenario y en el exterior… Pero lo que sí sabemos los que hemos asistido es que aunque las características sean algo distintas, por suerte el resultado ha sido parecido: bueno. Salvo algunos aspectos como el de la configuración del horario, la mayoría de asistentes han disfrutado mucho de estos dos días de concierto en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo.
Las ediciones anteriores se han venido celebrando durante el mes de mayo, cuando el calor ya era bastante considerable. Muchos fueron los que comentaron que las temperaturas serían más altas y que quizá no era buena idea aplazarlo un mes, pero el tiempo ha estado de parte del festival y hemos disfrutado de unas inusuales bajas temperaturas en pleno mes de junio, por lo que finalmente el calor no llegó a ser un problema. Tampoco lo fue el tema del acceso, ya que fue bastante ligero y no se formaron colas para entrar.
El viernes 12 de junio inauguraba el festival un plato fuerte: Rayden junto a Mediyama y Dj Mesh. El rapero era el encargado de abrir el escenario Cruzcampo sobre las 20:00h. A pesar de ser el primer artista del día, el éxito que está cosechando y el número de seguidores hizo que un grupo importante de público no quisiera perderse su actuación. “¡Que nos escuche Leiva desde su casa!”, gritaba el rapero antes de cantar el tema “Finisterre”, en la que colabora el cantante madrileño.
En el Escenario Ser eran Coco Tea & Irie Souljah los encargados de dar el pistoletazo de salida. A pesar de ser los segundos en actuar, hicieron bailar a todo el mundo con el mejor reggae y dancehall. En cuanto Rayden concluyó en el otro escenario, una lluvia de personas corrían hacia el escanario ser. El motivo no era otro que SFDK.
Los veteranos llevan ya muchas ediciones con el público del Territorios en el bolsillo, y no sólo porque jueguen en casa, sino porque actuación tras actuación demuestran por qué tienen esa legión de seguidores. Mientras, en el otro escenario los irlandeses The Strypes le daban el toque de rock a la jornada. Una lástima que estos dos grupos coincidieran porque a pesar de ser de estilos muy diferentes, ambos directos fueron dignos de disfrutar. Sfdk, hicieron votar sin parar al público, además de dar espectáculo. Legendario los acompañaba y sacaba una botella de ron mientras decía “Estos mamones me han copiado el nombre”, y bebieron todos para seguir con la fiesta. Un gran momento fue cuando dividieron al público en dos: los de un lado harían el “bum bum” y los del otro lado daría el “clap”, para que el ritmo base lo dieran los asistentes. El “bum bum clap” sonaba en todo el recinto, y tema tras tema quisieron mirar al pasado y tirar de un clásico como “¿Dónde está Wifly?”, además de otros como El Niño Güey o el tema “Orgullo Banderillero” en honor a la webserie Malviviendo. Lo cierto es que el de SFDK fue uno de los directos más potentes de la jornada.
En el Escenario Cruzcampo comenzaba Macaco, que nos contagiaba toda su energía y nos hacía bailar con cada uno de sus temas, imposible no hacerlo con ritmos tan pegadizos como el de Moving, Tengo o Hijos de un mismo Dios. También era imposible no estar Con la mano levantá durante su concierto.
Mientras, en el Escenario Ser nos llevaban A cualquier otra parte la banda Dorian, quienes se merecían bastante más público del que allí había, pero ese tipo de cosas son consecuencias de los solapamientos. Aún así estuvieron al 100% y nos ofrecían en directo temas como La tormenta de arena o El temblor. Durante su actuación se produjeron algunos fallos de sonido que se intentaban subsanar sin éxito. En resumen, no creo que la banda se fuera con el mejor sabor de boca y aún así se mostraron cercanos al público y con ganas de hacerlo bailar, y así lo mostraba Marc cuando bajaba del escenario para cantar parte de un tema junto a los presentes.
En el otro lado Javy Union comenzaba a poner la electrónica en la primera jornada del festival. Tras él, Julian Jewel sería el encargado de ponerse a los platos. Durante estas dos actuaciones, la mayoría del festival se concentraba en el otro escenario y no era para menos, pues alrededor de las 02:30h llegaría uno de los platos fuertes del cartel. Con The Zombie Kids daba comienzo en el Escenario Ser la música electrónica. El exitoso dúo hizo saltar desde la primera persona hasta la última con los temazos a los que nos tienen acostumbrados. Por supuesto, no podía faltar “Face”, su mítico tema.
Con las ganas de electrónica en el cuerpo y los motores a punto, llegaba al escenario un cabeza de cartel: Afrojack. El dj y productor ofreció un espéctaculo audiovisual difícilmente visto en ediciones anteriores, acompañando los temas de unos increíbles efectos como fuegos artificiales. Todo un espectáculo en el que disfrutaron hasta los más asépticos. En el otro escenario concluía la jornada a los platos Richie Hawtin, mientras que tras Afrojack cerraba el escenario JP Candela.
Tras esta jornada me quedaron claras dos cosas: que más vale llevar dinero en efectivo de sobra porque no cobran con tarjeta en ninguna parte del recinto, y que el día siguiente sería un gran día de conciertos con Calle13 en la programación.
El sábado 13 amanecíamos con la noticia de que los horarios habían sido modificados. La razón de este cambio venía dada por la lluvia de críticas recibidas al coincidir el concierto de Shotta con el de Calle13, por lo que intentaron dar una tregua para que todo el mundo pudiera ver al grupo puertorriqueño.
La cola de acceso fue bastante más extensa que el día anterior, lo que hacía intuir que el recinto estaría bastante más lleno, y así fue. Abría la jornada el flamenco y el buen rollo de Juanito Makandé, mientras que en el otro escenario daba inicio la brutal energía de los bosnios Dubioza Kolektiv.
En el escenario cruzcampo seguiría el flamenco de manos de Mártires del Compás, que a pesa de ser temprano ya llenaban la zona. En el escenario Cadena Ser comenzaba el rap que tanto triunfa en este festival. Primero llegaba El Chojin, que calentaba los motores del público. “¿Vosotros tenéis un Record Guiness? Yo tengo el Record Guiness del rapero más rapido”, decía al público antes de demostrar con gran maestría el por qué lo tiene. Cada vez había más público y es que faltaba poco para que saliera otro artista asiduo al festival: Shotta, que traía en su show a su hermano Tote King, a Morodo o a Nerviozzo, entre otros. Ofrecieron un show a la altura de las circunstancias con muchos temas de Flowesía, su último disco.
Mientras, en el escenario cruzcampo daban rock al festi la banda asturiana Ilegales, tras la que hubo un retraso considerable que causó el descontento de buena parte del público pues provocó que Supersubmarina y Calle13 se solaparan. De hecho, los de Baeza no dudaron en lamentarse ante el público por este reajuste de horarios y líos de última hora. Un poco desanimados pero con ganas de ofrecer al público el show que se merecía tocaron canciones como Viento de Cara o Arena y Sal.
Por su parte, el escenario cruzcampo con Calle13 sore él estaba a reventar, nadie quería perderse el show en directo. Un reivindicativo René salía al escenario con la camiseta del Movimiento Estudiantil. El no parar sobre el escenario lo transmitió al público, que no dejó de bailar y cantar temas como Latinoamerica o el éxito Atrévete Te Te. Una magnífica actuación que dejó al público más que contento.
Pero esto no era todo, tras Calle13 llegaba la hora del dúo británico The Ting Tings, que hicieron del Territorios una fiesta con su tema That’s Not My Name. Comenzaba a hacerse tarde y el recinto fue quedando más vacío, pero no por ello bajó el nivel del espectáculo. Bomba Estéreo supo seguir con el ritmo y siguieron haciendo del público una fiesta. Con ellos concluía ese escenario, mientras que en el otro los encargados de cerrar el festival fueron Edu Imbernon primero, y Paul Ritch al final.
El Festival Territorios concluyó con gran éxito a pesar de las dudas de muchos ante esta edición. Quizás el mayor fallo estuvo en la coordinación de horarios, pero seguro que el año que viene tendremos más y mejor.
