PhotoEspaña en primera persona

Por Cristina García Moreno.

 

Galería Cámara Oscura.

C/ Alameda, 16 1º B 28014 Madrid

29 de Mayo – 25 de Julio

 

camara%20oscura%20photoespañaVivir en primera persona una inauguración es todo un lujo para quien se quiere dedicar al ámbito artístico, más aún si es la primera vez que tiene esta oportunidad. Mi experiencia en el sector artístico-cultural se ha centrado en ferias más que galerías, y aunque finalmente es el trabajo de ambas lo que lleva a buenos resultados, no es lo mismo estar en un lado que en otro.

Siendo coordinadora de la feria tenía que tener bajo control que todos los galeristas estén contentos, que cada luz esté en su sitio, que no les falte nada y si necesitan algo intentar proporcionárselo.

Sin embargo, desde los ojos de un galerista la perspectiva cambia. La puesta a punto no se reduce a que esté limpio el stand, sino que estén perfectamente colgadas las obras, que no exista huella alguna en los marcos o cristales, que la lista de precios sea visible y sobre todo: que los coleccionistas les visiten.

Puede que el primer día que inauguras no vendas, pero es importante que la exposición tenga buena acogida, que el montaje sea adecuado, que el catering no sea insuficiente, que tengas todo lo necesario para que todo el mundo esté a gusto y nadie quede sin atención.

En el mundo del galerismo, todo es a estilo Juan Palomo: la limpieza, el catering, el montaje, los agujeros de la pared, el repinte de la exposición anterior, la iluminación; debes ser camarero y guía de la exposición, ejercer de fotógrafo y de                                                                                 relaciones públicas entre los coleccionistas, visitantes y el artista. Es todo. Siempre debe sonreír, ser amable y estar dispuesto a escuchar ofertas de coleccionistas que aman esa obra pero, tch… necesitas un pequeño descuento.

Es todo un subidón cuando empiezan a venir las primeras visitas, cuando acuden a tu cita invitados, nuevos coleccionistas y viejos conocidos, las copas de vino se amontonan y se escucha un leve murmullo de pequeños grupos que comentan las obras, señalando las que querrían tener colgadas en el salón de sus casas.

Esta fue mi primera experiencia, ocasión que me proporcionó Juan Curto de la Galería Cámara Oscura, quien se acordó de mí para suplir a su asistente y con quien pude colaborar el pasado viernes 29 de mayo en la inauguración de PhotoEspaña 2015.

En esta ocasión la muestra venía de la mano de Vicente Tirado del Olmo, cuya obra fue expuesta contando con cinco fotografías de gran formato, una de formato medio y un políptico muy llamativo que se vendía completo y por piezas.

Podemos disfrutar por primera vez en Madrid de este artista emergente, quien trabaja en el género paisajístico con una visión muy personal. Hereda la visión del paisaje como género en sí mismo del Romanticismo, -cuando los artistas enfrentaban la naturaleza con el hombre, dejando ver la distancia que ha tomado dicha relación-, y la adapta mostrando una naturaleza salvaje, con paisajes volcánicos que nos remontan al momento previo de la aparición del hombre en la tierra.

De ese mismo modo utilizan en publicidad la idea del anhelo de ésta relación con la naturaleza como podemos ver en anuncios de coche de lujo, donde se presenta la naturaleza como espacio de deseo solo alcanzable por dicho automóvil. Esto lo toma Tirado del Olmo y lo interviene colocando “lutos rojos” en el lugar donde estaría la mercancías a vender.

Generando así una exposición que nos habla del paisaje sublime, de la relación con el hombre y el uso de la publicidad que nos desvincula de lo que nos rodea, que banaliza cualquier temática y género y que coloniza nuestros espacios más íntimos, manipulando nuestros deseos.

Y así es cómo ha sido mi primera inauguración, y así se lo hemos contado.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *