Historias de fantasmas de un anticuario: ‘El grabado’ de MR James
Por Cristina G.F. de @abrirunlibro
Historias de fantasmas de un anticuario –Ghost Stories of an Antiquary-, da el título a la primera colección de MR James, Montague Rodas James (1862-1936), publicada en 1904. Gran erudito, fue un paleógrafo y medievalista británico, rector en Eton College y en King’s College, Cambridge. Especialista y traductor de apócrifos, fue un escritor de cuentos ‘modernos’ de terror y fantasmas, concibiendo sus historias como simple entretenimiento para ser contadas durante las tradicionales veladas de Nochebuena.
Admirador de Sheridan Le Fanu, sus cuentos abandonan el estilo gótico clásico e introduce las apariciones de espectros en la sociedad de la época recreados en entornos bucólicos ingleses. Los protagonistas que explican sus experiencias son, principalmente, hombres a su semejanza (arqueólogos, anticuarios, historiadores…) que evitan los tecnicismos y que, alejándose del ocultismo, se mueven en un hábitat erudito como bibliotecas, universidades o archivos.
Sentando las bases del método narrativo “jamesiano” -jamesian-, los relatos no disponen de una gran ambientación sino que se centran en detalles nimios para dar protagonismo al hecho que el autor quiere resaltar. La incógnita viene siempre de la mano de un objeto de anticuario, ya sea libro, grabado, etc. Los fantasmas que MR James recrea son seres malvados que hacen su aparición lentamente. El autor considera que al lector hay que ir conduciéndole para que vaya sintiendo miedo de forma paulatina y para ello irá introduciendo el suspense poco a poco para que éste pueda sentir e imaginar la escena. No es hasta casi el final del cuento, cuando se desvela el desenlace.
Una muestra representativa de los relatos de MR James, puede encontrarse en El grabado. Cuento de apenas 20 páginas donde se narra la historia, en primera persona, del conservador de un museo en Oxford que recibiendo la recomendación de adquirir un dibujo y a pesar de ser, a primera vista, un grabado corriente, decide examinarlo.
Una vez recibido, Mr. Williams, así se llama el conservador, comprobará que se trata de una imagen nada excepcional y de baja calidad:
[…] representaba la fachada de una casa solariega, no demasiado grande, del siglo pasado, con tres filas de ventanas guillotinas y molduras biseladas alrededor, una balaustrada con bolas o ánforas en los ángulos, y un pequeño pórtico en el centro. A uno y otro lado había árboles, y frente a ella se extendía un gran espacio de césped. En el estrecho margen tenía grabado lo siguiente “A.W.F. sculpist”. Nada más. En conjunto, daba la impresión de que era obra de un aficionado.
Finalmente, la realidad convertirá al grabado en una historia de venganza muy inquietante.
Es curioso como MR James consigue, en El grabado, dar veracidad a lo relatado. A medida que vamos introduciéndonos en el cuento, nuestra percepción llega a considerar que lo que leemos puede ser perfectamente plausible y podría sucedernos a nosotros en cualquier momento; daremos por hecho la posibilidad de la existencia del ser fantasmagórico ya que la narración in crescendo provoca un estado de tensión y de credibilidad, algo muy difícil de conseguir y que sólo podremos encontrar en maestros de la literatura de terror. Un cuento de ficción que, además, nos enseña un tipo diferente de narración dentro de los autores de este género.
Historias de fantasmas de un anticuario: El grabado. MR James.
También tiene historias con tintes humorísticos.
Me fascinan los cuentos de terror aunque no descarto leer otros géneros de MR James.