Poco Marivaux y casi nada de Flotats: extraño interludio
Por Horacio Otheguy Riveira
Un viaje en el tiempo con la exquisita delicadeza de un autor que vivió entre 1688 y 1763 y rindió al amor sus mejores condiciones. Fusionó estilos y dejó que en El juego del amor y del azar triunfaran —al menos brevemente— los sentimientos sin capas sociales, sin prejuicios: vestía a sus personajes con ropas “imprudentes” para avanzar en una especie de lujuria bien templada con más rubores que pasiones. Pocos años después rodarían muchas cabezas diletantes con la llegada de la Revolución Francesa y un cambio radical en la manera de mirar el mundo y romper sus límites sociales.
Es este Pierre de Marivaux un autor poco transitado en España, y me parecía una ocasión perfecta para presentarse en sociedad de la mano del traductor Mauro Armiño y el director Josep Maria Flotats, que tan excelentes episodios de teatro francés tienen en su haber.
Desde luego mis entusiasmos fueron constantes, desde la preciosísima joya intimista París, 1940, basada en los diarios de un maestro del teatro como Louis Jouvet; o La cena y El encuentro entre Descartes y Pascal, y La mecedora, las tres de Jean Claude Brisville: qué armonía entre el concepto de puesta en escena y la adaptación al castellano, de qué manera tan profunda y tan hermosa se fusionaban estilos y la palabra y el gesto formaban una estela inolvidable.
El difícil equilibrio del texto, la rica prestancia de los intérpretes, y la dirección general como si se tratara de una sinfonía, logró un paisaje histórico en el teatro español, no sólo como representación de una gran dramaturgia francesa, sino como la expresión fidedigna de un mundo escénico que une el teatro de ideas con la acción dramática, evitando el plomo discursivo y la pedantería filosófica, para dejarnos finalmente con la sensación de haber participado en una experiencia insólita, interesante, a veces polémica, siempre conmovedora.
Me duele descubrir que en este Juego del amor y del azar veo a Mauro Armiño y su dominio de la traducción bastante solo, en todo caso bien acompañado por la formidable resolución escenográfica de Ezio Frigerio (naturaleza y ambiente burgués que es a su vez evidente decorado para jugar al teatro dentro del teatro) y el vestuario delicadísimo en los más mínimos detalles de Franca Squarciapino. Entre los tres hay obra, pero escasa comunicación con los actores, salvando uno que otro momento en que la función parece despertar de un raro letargo.
La sensación es que el gran Flotats se ha marchado sin previo aviso, ya que al leer sus palabras en el programa no encuentro el modo de asociar su propuesta a lo visto en el escenario, una serie de enredos bajo mínimos, más aún teniendo en esta misma ciudad de Madrid otra versión sobre tema muy similar, escrita casi un siglo antes y resuelta con una riqueza de personajes y situaciones mucho mayor (Donde hay agravios no hay celos, de Rojas Zorrilla).
A quien le interese esta noble arqueología, resulta muy interesante cotejar ambas funciones, por ver cómo se las gastaban los dramaturgos en tiempos lejanos para luchar con la feroz identidad social de su época, las imposiciones del mundo al que los personajes se debían para poder sobrevivir con alguna clase de dignidad.
Seguramente fue un lapsus, no siempre se puede estar en la cima, ni siquiera siendo alguien con un carrerón como Flotats. Lástima grande ya me da que nunca trajo a Madrid su versión de Stalin con Carmen Conesa.
Esperanza tengo —no menos intensa— de verle otra vez en acción (su última aparición por Madrid fue admirable: La verdad, como protagonista y director) con algunas de sus muchas capacidades de sorprenderme gratamente.
El juego del amor y del azar
Autor: Pierre de Marivaux
Traducción: Mauro Armiño
Dirección: Josep Maria Flotats
Intérpretes: Enric Cambray, Àlex Casanovas, Rubèn de Eguia, Guillem Gefaeli, Vicky Luengo, Bernat Quintana, Mar Ulldemolins
Escenografía: Ezio Frigerio
Vestuario: Franca Squarciapino
Iluminación: Albert Faura
Producción: Teatre Nacional de Catalunya
Lugar: Teatro María Guerrero
Fechas: Del 5 al 23 de noviembre 2014
Encuentro con el público el sábado 15 de noviembre, al finalizar la representación. Entrada libre, hasta completar aforo.
Funciones con accesibilidad para personas con discapacidad auditiva y visual, días 20 y 21 de noviembre.