World Press Photo 2014
Por Marvic Otaiza
Cuando la fotografía de prensa se traslada a los muros de una exposición, cambia nuestra percepción, la realidad se transforma siguiendo un proceso casi alquímico, y su recuerdo recobra la lucidez inmediata oculta tras la agresividad constante del cúmulo y la desinformación.
En un mundo saturado de imágenes y en el que la información relevante sólo a veces se convierte en noticia, se agradece una percepción más pausada, más humanizada de la labor que ejerce el fotoperiodista.
Frente al caudal publicitario de escenas estáticas o en movimiento y de la siempre constante frugalidad televisiva, la fotografía como contenido no accesorio, como forma de pensamiento en sí misma, siempre será un factor a tener en cuenta, una reflexión sobre la falta de análisis, la superficialidad y el consumo vacío y desmesurado que actualmente alientan los medios de comunicación.
La muestra itinerante World Press Photo 2014, compuesta por 160 fotografías de un total de 53 fotógrafos de 25 nacionalidades, resume acontecimientos del pasado año en nueve categorías temáticas que abarcan desde la naturaleza y los deportes hasta la noticia general. Y a pesar de que esta «memoria acumulada» dependa en ocasiones del monopolio ejercido por las grandes agencias, pueda llegar a considerarse «aburrida» o sea concebida como una absurda molestia ante la elocuencia publicitaria y el espectáculo grotesco, su indudable valor social prevalece como aspecto fundamental y necesario.
Visiones valientes y honestas sobre la guerra en Siria, identificaciones holísticas con el medio ambiente y las especies que habitan nuestro planeta, valores subvertidos como causa y consecuencia del crimen organizado y la miseria estructural, vivencias íntimamente cercanas a la violencia doméstica por cotidianas, miradas conscientes hacia la globalización y su engranaje siniestro, nuevas desmitificaciones en torno a la belleza o la soledad…
La vida en conceptos y su representación plausible, sin olvidar el primer premio otorgado a John Stanmeyer por «Signal», de tintes cuasi publicitarios, fiel reflejo de la contemporaneidad en tránsito, o la mención especial del jurado a la serie de imágenes tomadas por el fotógrafo amateur Tim Homes en Dunalley, Tasmania (Australia) durante el incendio forestal que devastó la región a principios de 2013, incluido su hogar.
Enumeraciones significativas de un mundo en el que la imagen se hace imprescindible para profundizar en su conocimiento. Una apuesta por la calidad visual que ya Mario Benedetti advirtió a través de estas palabras: «La fotografía es sobre todo el fotógrafo. […] Intento destacar su responsabilidad en el acto libre de elegir primero, y luego exponer un texto visual en el que pueda hacerse una lectura que de algún modo libere la realidad. Y también que esa lectura sólo será posible cuando todos y cada uno de nosotros nos hayamos alfabetizado para la imagen liberadora».
Esta es la continuidad de un diálogo con lo fotografiado. El progreso de un género que va más alla de sus referencias históricas. La evolución imparable de este poderoso canal de expresión y su razón de ser como resorte generador de opinión pública.
World Press Photo
Círculo de Bellas Artes – Sala Goya
Alcalá, 42 28014 Madrid
Del 12 de septiembre al 13 de octubre