Ernest Hemingway, escritor y guerrero
Por Pilar Martínez.
Fue definido por muchos como uno de los principales cuentistas y novelistas del siglo XX. Su estilo minimalista y sobrio tuvo una gran calado sobre la ciencia ficción de ese mismo siglo, de la misma manera que su carácter e imagen y su vida de aventura y riesgo marcaron de una fuerte manera a las generaciones posteriores.
La obra de Ernest Hemingway, centrada sobre todo en los años 1920 y 1950 le valieron al autor premios de la talla del Nobel de Literatura o el Pulitzer . Este último conseguido gracias a una de sus obras cumbre “El viejo y el mar”.
Esta obra junto a otros títulos como “Adiós a las armas” , “Fiesta” o “Por quién doblan las campanas” le valieron al autor su fama y reconocimiento mundial. Su estilo, construido y fortalecido tras su experiencia en la Primera Guerra Mundial estuvo presente en la extensión de su obra, este provocó la inclusión del autor en el grupo de escritores modernistas de ese momento que reaccionaron contra el estilo de los escritores del siglo XIX.
El amor, la naturaleza, la guerra o la pérdida son los temas más recurridos en la gran obra de Ernest Hemingway. A pesar de ellos, recurrentes de la literatura estadounidense, encontramos otros temas también importantes como la mujer y la muerte o el la emasculación. El primero de ellos más presente en sus primeras narrativas como “Campamento indio”, mientras que el segundo puede ser fácilmente encontrado en obras como “Fiesta”.
Boxeador amateur en su juventud, Ernest Hemingway recibió muy buenas críticas por su trabajo sobre todo en sus comienzos, sin embargo el autor fue el objeto de crítica por su conducta y moralidad, llegándose a casar hasta en cuatro ocasiones. Tanto la vida como obra del autor estuvo marcada por su carácter pasional y aventurero. Sus experiencias personales y su compromiso con acontecimientos de la época ahondaron en la vida del autor y determinaron sus posteriores años.
Tuvo un papel de relevancia en sucesos como la Guerra Civil Española, trabajando como corresponsal para la North American Newspaper Alliance y pudiendo ver todos los atroces acontecimiento que se desarrollaron durante la contienda.A esta experiencia debemos la creación de una de sus más famosas obras “Por quién doblan las campanas”.
También estaría en otros en otros acontecimientos de grandísima importancia como el Desembarco de Normandía, La batalla de las Ardenas o la liberación de París, viviendo en primera línea casi todos los episodios que conformaría la Segunda Guerra Mundial. En 1947 Ernest Hemingway recibió la Estrella de Bronce debido a su valentía y reconocido valor en esta guerra.
La muerte siempre estuvo rondando la vida de Ernest Hemingway. En 1954, cuando estaba en África, Hemingway casi perdió la vida en dos accidentes aéreos sucesivos que lo dejaron gravemente herido, con secuelas tanto físicas como psíquicas. En ese mismo año el escritor se haría con uno de los premios más codiciados del mundo de la literatura, recibió el premio Nobel de literatura, aunque no pudo ir a recogerlo debido a los recientes accidentes.
En los años posteriores el autor siguió dando forma a su obra autobiográfica “París era una fiesta” la cual terminaría en 1959. Tan solo dos años después el escritor segó su vida con un certero disparo con su escopeta favorita, después de batallar con una fuerte depresión y una pobre salud. A pesar de que su muerte en un primer momento fue tratada como accidental, cinco años después su última esposa Mary Hemingway admitió que su marido se había suicidado.
Durante sus últimos años, el comportamiento de Hemingway fue similar al de su padre antes de que se suicidara. El del escritor y su padre no fueron los únicos suicidios que se fueron desarrollando, pues su hermano, su hermana y posteriormente su nieta terminaron con su vida de la misma manera.
Su nombre, influencia y legado obstentan un sitio de honor dentro del mundo de la literatura, algunos de los escritores que vinieron después lo emularon, otros lo evitaron. Pero si algo se ha confirmado con el paso del tiempo es que ni la vida ni la obra de Ernest Hemingway ha dejado indiferente a nadie. Una vida de letras y rifle, de libros y batallas, la vida de uno de los escritores más guerreros de los últimos tiempos.
El viejo, y el mar. Fin. . . .
Hemingay, y el hallar lo buscado, en tu caso.
El barco, de mi padrastro, fue de Molina a Moscú, Bragado por la noche funesta.
Y los compositores, aquellas estrellas fugaces de letania ora perseguían los cachlotes, que el sonido de los motores no conseguía hacer olvidar de el momento_ en que_ aprendi_ a nadar, como la presa salvificada de ese meandro oscuro que es la noche, y su gran cornucopia, a lo misterioso de esas condiciones que seamos fieles el cocotero de nuestros miedos peregrinos no da fruto en aquella fragua de vendavales y tenerlos como llamas de fogatas de el mundo cale, vale una moneda de oro. Para nuestro maravilloso mundo submarino, de acuarelas y sentimientos de el olvido eterno de ls soledad de el barco misterioso.
Fin.
Socrates, y Antes, era Hiperion. Ahora, es Viginia, Wolf. De nuevo. Fin. El tiempo, no es el una dirección del foro mismo. De los condenados. Fin. Fin. FIN. FIN. si, mirando, las estrellas. Psicosis, no. FIn. . . . . FIN. . . . FIN. . . FIN. . . . . Fin….. .. .. . .. .. .. . . . . . . FIN. mirando, las estrechas “&/= calles. FIN. FIN. no, es cierto. es pensando. Fin.
Los plantigredos, son aves, rápidamente veloces. Fin. FIN. . . . FIN. . , . . . FIN. FIN.
Percepciones. No soy 7n yo. Fin. FIN.FIN.
Borralo, todo.
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1 ²¹2. fin. es, un estudio de las características de lo portentoso, había en un círculo. FIN. FIN. . . . , . . . . .
FIN. FIN. .
Borralo, todo.