Diseñar América: el trazado español de los EEUU. En palabras de Juan M. Hernández León

.

Disenar_americaLa huella española en suelo estadounidense.

Hasta el 12 de octubre, la Biblioteca Nacional y la Fundación Consejo España-Estados Unidos presentan la exposición Diseñar América: El trazado español de los Estados Unidos, que reúne la aportación española a la construcción del territorio, el paisaje y la ciudad en Estados Unidos. Se exhiben más de 70 obras originales procedentes de los fondos de la Biblioteca Nacional, del Archivo General Militar y del Archivo del Museo Naval.

A pesar de que se ha tratado en muestras anteriores la herencia española en Estados Unidos, ya sea dentro de exhibiciones más amplias o siendo ésta el tema principal, Diseñar América: El trazado español de los Estados Unidos pone de manifiesto un aspecto original e inédito como es la contribución española a la construcción del territorio y paisajes norteamericanos. Para ello, la exposición está organizada en forma de recorrido abierto y transversal a través de varias áreas de interés pertenecientes a los ámbitos de la arquitectura, del urbanismo y del territorio.

El comisariado está formado por el Grupo de Investigación Paisaje Cultural de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), liderado por Juan Miguel Hernández León, actual Presidente del Círculo de Bellas Artes y del que destacan entre sus últimos proyectos el Palacio de Congresos en la Universidad Laboral de Zamora, en colaboración con Francisco Mangado, y el Museo de Arte Contemporáneo en Vélez, Málaga. Junto a Hernández León, dirige este comisariado, Francisco Arqués Soler, profesor en el Departamento de Proyectos Arquitectónicos en la UPM, director de la Fundación Cultural Miguel Fisac y director, junto a Darío Gazapo, del Estudio Paisajístico de la Cuenca Minera de Puertollano.

En la exposición se incluye la narración de relatos históricos, políticos y culturales así como de acontecimientos históricos (expediciones, hechos militares o políticos) que, unido a los propios documentos recabados, resaltarán la relación de quinientos años en común entre España y Estados Unidos, a día de hoy presente y reflejada en el país Norteamericano. También, Diseñar América: El trazado español de los Estados Unidos es una muestra más de ese vínculo, ya que se enmarca dentro de las numerosas conmemoraciones que se llevan realizando desde 2013 y se prolongarán hasta 2015 como son el V centenario del Descubrimiento de la Florida por Ponce de León, el V centenario del Descubrimiento del Pacífico por Núñez de Balboa, el III centenario del nacimiento de Fray Junípero Serra, fundador de California y el cuatrocientos cincuenta aniversario de la fundación de la primera ciudad estadounidense (San Agustín, Florida), por Menéndez de Avilés.

Para más información consulte: http://www.bne.es

.

Entrevista a Juan Miguel Hernández León, comisario de Diseñar América: El trazado español en Estados Unidos.

AméricaP.- ¿Qué destaca de la exposición?

La exhibición de los magníficos fondos cartográficos que se han seleccionado para explicar de qué manera se han ido dibujando y diseñando el territorio y las ciudades norteamericanas. La cartografía era un instrumento de colonización, de investigación, de elaborar una imagen de un continente que, históricamente, había aparecido como una especie de fisura entre el continente euroasiático y el europeo. A partir de leyendas, de datos imprecisos, de herramientas y de visiones de los colonizadores, se va formando esa imagen.

P.- En aquellos inicios cartográficos, California aparecía como una isla.

Sí. Incluso con accidentes geográficos inventados, porque no se llegan a conocer con claridad.

P.- ¿Qué es lo más básico de esta exposición?

Confrontar y comprobar cómo aquella serie de trazas, puntos, fronteras, límites… es algo que no se ha ido de los actuales Estados Unidos.

P.- El legado español se sigue viendo en ciudades como Nueva Orleans, Los Angeles, Nueva York o San Francisco.

Por supuesto. Arquitectos ingenieros como Gustavo Guastavino fueron introduciendo sus patentes constructivas de costa a costa de aquel país. Por ejemplo, la iconografía del Nueva York del siglo XIX fue configurada por este español.

P.- También existe un legado menos visible…

Efectivamente. Como el camino real de Fray Junípero Serra, que hoy en día coincide en paralelo con la autopista Freeway 101, que recorre la costa atlántica. O cómo aquellos recorridos transversales que permitían a las expediciones de Soto o Coronado ir caminando por aquel territorio, se han consolidado como estructura de conexión que se corresponde con la contemporánea. La idea de que España nunca se fue sigue vigente, porque su legado existe en ciudades muy importantes estadounidenses, con referencias arquitectónicas y, sobre todo, en la organización del territorio.

P.- Es como si lo español se hubiera hibridado con lo anglosajón.

En una de las piezas documentales más importantes de esta exposición, que hace referencia al Tratado de Versalles firmado en París en el siglo XVIII, aparece que la frontera del territorio español en Estados Unidos iba desde Florida a Louisiana y llegaba prácticamente hasta Canadá. Por tanto, el ámbito de dominio anglosajón era mucho más reducido. Pero después aparece una especie de hibridación tras la expansión paulatina, mediante compra o anexiones de territorios, anglosajona.

P.- Sobre suelo hispano se construyó la primera ciudad para esclavos negros liberados.

Fuerte Mosé, cuyo nombre original era Gracia Real de Santa Teresa de Mosé. La construcción fue decretada en 1738 por el embajador español de Florida, Manuel de Montiano. España ofreció a esclavos huidos de la zona anglosajona la posibilidad de alcanzar la libertad a condición de que se incorporaran a nuestro ejército y profesaran la religión católica. Fue el preludio de las tensiones emancipadoras posteriores que derivaron en la Guerra de Secesión americana.

P.- ¿Cuál es el documento más valioso de la muestra?

Hay muchos, pero quizás los más significativos sean el plano del Tratado de Versalles, y el Atlas de Humbolt, que va determinando los caminos del territorio.

P.- ¿Ahora mismo, qué futuro tiene nuestro idioma en Estados Unidos?

La toponimia estadounidense conserva una servidumbre hacia la lengua castellana importantísima, mucho más de la que se supone. Y la presencia pujante de nuestro idioma, cada vez, en algunos lugares norteamericanos, como segunda lengua oficial, que implica un potencial de la cultura española. E incluso en el equilibrio político del país.

.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *