Drama y misterio en The Leftovers

POR SARA SERRA. Quienes todavía estén buscando una serie similar a Perdidos llena de capítulos de misterio, drama, acción, enigmas por resolver y que se convierta en un fenómeno televisivo y social, pueden intentar ver The Leftovers. Damon Lindelof, co-creador de Perdidos, es el responsable de esta serie de HBO basada en el libro de Tom Perrotta, Ascensión (Colmena Ediciones, 2013), quien también es creador y guionista de la serie.

El capítulo piloto es igual de impactante que el primer de Perdidos, pero sin llegar a ser tan espectacular. Todo comienza un 14 de octubre cuando el 2% de la humanidad desaparece repentinamente y sin motivo aparente. Tres años después nos muestran cómo los habitantes de Mapleton, Nueva York, todavía no han podido superar el grave suceso.

A pesar de que el inicio se mueve entre la confusión y el misterio, la serie se centra en la parte más dramática; lo menos importante es descubrir por qué han desaparecido. Lo que realmente interesa es ver cómo ha afectado el acontecimiento a la gente que ha quedado, cómo han cambiado sus relaciones y cómo pueden vivir, o no, con la incertidumbre y sin las respuestas que necesitan para seguir adelante. De ahí la semejanza con Perdidos, otra serie que hablaba de pérdida y de confusión pero que más allá de saber qué era la isla y por qué estaban allí, se centraba casi por completo en los personajes.

El protagonista de The Leftovers es Kevin Garvey, un jefe de policía que sustituye a su padre ya retirado. Ninguno de los miembros de su familia ha desaparecido pero ha quedado igual de rota que si se hubiera visto afectada por el dramático suceso. Su mujer ha ingresado voluntariamente en una secta llamada The Guilty Remnant (formada por los culpables que quedan), su hijo se ha marchado a otro grupo liderado por un misterioso gurú y su hija adolescente no facilita demasiado las cosas.

Garvey y su familia no son las únicas personas centrales de la serie. Megan Abott, interpretada por Liv Tyler, es una mujer a punto de casarse que vive perseguida por The Guilty Remnant y Nora Durts, una mujer que ha perdido a su marido y a sus hijos. La serie también se centra en otros personajes, como el reverendo Matt Jamison, clave para introducir de forma amplia temas como la religión o la filosofía, disciplinas que ayudan a muchos de los “que han quedado” a dar sentido a las preguntas que ni la autoridad ni la ciencia son capaces de responder.

Perdidos se estrenó en 2004, cuando todavía no existía el auge de redes sociales que hay ahora. Hace diez años proliferaron los blogs especializados en analizar cada elemento de la serie; desde los guiños literarios hasta el significado bíblico de algunas escenas. A The Leftovers todavía le queda mucho camino por recorrer para ser un fenómeno televisivo o, quien sabe, quizá nunca lo llegue a ser. Después de seriesfallidas como Flashback será todo un reto conseguir que la gente interactúe semana tras semana los capítulos de The Leftovers en Twitter o en Facebook o que quieran averiguar el significado de cada elemento que va apareciendo a lo largo de esta primera temporada.

The Leftovers no es Perdidos pero puede ser una de las series más interesantes para ver este verano.

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