Entrevista a Natalia García
Por Falsaria.
Hace unos meses, Natalia García presentaba con éxito Flores de invernadero, su primera novela y Falsaria estuvo presente. Hoy, una de las revelaciones de 2014 vuelve al ruedo con Cuatro estrellas, una historia original que narra la historia de Rosa, la recepcionista de un hotel de cuatro estrellas que tendrá que salir adelante en medio de un torbellino de acontecimientos intrigantes. Después de la presentación en Tipos Infames en Madrid, nos hemos vuelto a ver.
Después de tu primera novela, Flores de invernadero aquí estamos nuevamente con Cuatro estrellas, una novela donde narras el torbellino de la vida de Rosa…
Efectivamente, he cambiado el entorno publicitario por el ambiente de un hotel; por circunstancias personales he tenido una época en la que tuve que realizar varios viajes y encontré la inspiración observando a la gente de mi alrededor en los distintos hoteles en los que me alojé.
Rosa es una mujer que ha pasado por distintas etapas de la vida, desde ayudar a su madre a limpiar habitaciones, hasta convertirse en una mujer responsable pero «en constante estado de guardia». ¿Puede alguien así sentirse completamente a salvo de los vaivenes de la vida?
La infancia junto a su madre le marcó sus aspiraciones profesionales y se impuso una excesiva exigencia a la hora de enfrentarse al trabajo. La verdad, en su caso, creo que los vaivenes de la vida no la han ayudado a sentirse a salvo; al contrario, la han condicionado mucho su forma de ver la vida.
Por otro lado, Rosa es una mujer muy creativa (siempre maquinando mejoras y soluciones a los problemas), pendiente del último detalle, proactiva. ¿En quién te has basado para tejer su personalidad?
No me he basado en nadie en particular, he creado el personaje pensando en alguien con afán de superación.
Otra de las características de Cuatro estrellas es que está repleta de Plot Point (puntos de giro) al final de cada capítulo, lo que hace la novela difícil de abandonar. Has explotado esta técnica hábilmente…
Creo que es una de las características de mi forma de escribir. Me gusta crear capítulos cortos que cierren con interrogantes que “obliguen” a seguir leyendo.
Recordando la lectura de Flores de invernadero, tu primera novela, Cuatro estrellas comparte la crónica de personajes femeninos con mucha personalidad y, a su modo, audaces…
Me siento muy identificada con estos personajes, me siento muy cómoda creando protagonistas que sean mujeres fuertes y decididas. No sé, supongo que me identifico en muchos aspectos con ellas.
Leyendo Cuatro estrellas se me vino a la mente, aun siendo muy distintas, la novela Mi padre es mujer de la limpieza de Saphia Azzeddine, donde se muestra la evolución del personaje desde niño, sus sueños y sus fuertes lazos con sus padres… ¿Qué buscabas realmente a medida que la historia se desarrollaba?
Ofreciendo pinceladas sobre el pasado de Rosa y la relación estrecha con sus padres, he intentado dar explicación a su comportamiento presente. Intento crear complicidad con ella, aun cuando su comportamiento no es correcto, para que los lectores lleguen a entenderla. El núcleo familiar compuesto por padre, madre y ella han creado una piña que ha forjado su personalidad.
Cuatro estrellas es tu segunda novela donde, es evidente, se han afianzado características tuyas: fluidez, capítulos cortos, crónicas cotidianas muy detallas, etc. Sin embargo, ¿qué significa para ti esta segunda producción?
Supone un afianzamiento personal a la hora de escribir, aunque acabo de empezar y me queda mucho por mejorar y aprender, pero el saber que soy capaz de relatar una historia con mas perspectiva que con Flores, en la que puse mucho de mí y de mis experiencias, me llena de satisfacción. En Cuatro estrellas invento una historia en un ambiente alejado de mi realidad más cotidiana.
«Un hotel es un mundo», es, de algún modo, la reproducción del mundo en un espacio reducido y, por tanto, representa un riesgo. ¿Por qué has elegido este escenario para contar la historia?
Efectivamente “es un mundo” y por eso me gusta, encuentras a gente de todo tipo, experiencias diferentes, una gran riqueza de matices y eso da mucho juego.
Hoy en día es imprescindible tener un blog, un lugar donde te encuentren, donde expresarte más allá de tus libros.
A la hora de ponerte a escribir ¿Cuál fue la diferencia entre Cuatro estrellas y Flores de invernadero?
Como te comentaba antes, el nacimiento de Flores fue algo casual, una necesidad de escribir sobre experiencias vividas en un entorno en el que he trabajado durante muchos años, como es el sector publicitario. Comencé a escribir sin pensarlo y la novela se fue forjando sola. En cambio con Cuatro estrellas el relato ha sido más meditado, más buscado y con más confianza en mí misma al saber que era capaz de contar historias a los demás.
Te manejas muy bien en las redes, tienes una web excelente donde, entre otras muchas cosas, mantienes una relación con el lector y vendes tus obras. ¿Realmente es tan importante como se cree estar al tanto de las nuevas tecnologías y el marketing para un escritor?
Muchas gracias por pensar que mi web es excelente, la verdad es que hoy en día es imprescindible tener un blog, un lugar donde te encuentren, donde expresarte más allá de tus libros. Es tan difícil darte a conocer que, gracias a las redes sociales, los escritores noveles disponemos de una vía directa y muy rica para difundir nuestros relatos, aunque debe de ser una plataforma viva y no dispongo de demasiado tiempo… no es fácil, pero al hacerlo con gusto al final siempre encuentras el tiempo.
Has publicado dos libros de gran calidad y hace unos años que estás en esto. ¿Tienes ya una opinión formada sobre el mercado editorial español?
Creo que es excesiva la oferta, y que desgraciadamente se mezclan libros de calidad con otros puramente comerciales que a mí personalmente no me gustan pero que tienen muy buena salida por tratarse de autores de gran relevancia mediática. Las nuevas tecnologías ayudan mucho a poder publicar a gente como yo, desconocida por el gran público, y que de otra forma sería muy complicado. Eso es fantástico, aunque sin agente literario que te guíe es difícil moverte en un sector tan complicado. En mi caso todo esto me afecta poco porque hago lo que me gusta que es escribir, no tengo más metas que seguir disfrutando, mejorando y entreteniendo a la gente.
¿Qué tal ha sido la experiencia de presentar Cuatro estrellas en la librería-café Tipos Infames, un lugar tan especial de Madrid?
Fantástica, como siempre; ambos libros los presenté allí. Buscaba un lugar diferente y con encanto y lo encontré. Es una librería deliciosa, un nuevo concepto en el que se combina una buena lectura con un vino, o una charla con amigos en un momento de relax. Me resulta un lugar encantador.
¿Deseas agregar algo más?
Daros nuevamente las gracias por vuestro apoyo. Para mí es muy satisfactorio hablar de mis novelas y saber que os han gustado. ¡Espero que no dejéis de hacerlo! Ya estoy con la siguiente. Cuando disfrutas con algo puede llegar a ser adictivo, las historias comienzan a perseguirte. Es fantástico.