RetroMadrid 2014
Hola de nuevo, amantes de los videojuegos y, esta vez, apasionados de lo retro. Los pasados días 26 y 27 de abril tuvo lugar la convención RetroMadrid, donde los más nostálgicos saciaron sus ansias de ver, jugar y adquirir las consolas y los juegos que marcaron una época. Por supuesto, allí estuvimos.
Este evento fue celebrado en Matadero, donde año tras año se ha visto crecer el número de visitantes. Este año en concreto los retro-adictos se vieron envueltos en unas colas kilométricas tanto para comprar entradas como para entrar al recinto, así mismo la venta de entradas para el sábado se cerró a las 12 de la mañana y mucha gente se tuvo que quedar fuera, lo que desató la ira de algunos hasta el punto de casi sacar horcas y antorchas (¿exagerado? ¿yo?).
Los organizadores explicaron (a cualquiera dispuesto a escuchar, que no eran muchos) que fue un problema ajeno a ellos, que no pudieron evitar ni solucionar del modo que a todos nos hubiera gustado. Todo esto fue debido a la nueva ley de autoprotección para la Nave 16 de Matadero reducía el aforo de esta a la mitad de lo que estaba estipulado. El problema fue, pues, que el número de entradas que se puso a la venta estaba orientado a alcanzar un aforo muy superior al finalmente permitido. Los organizadores de RetroMadrid intentaron conseguir por todos los medios legales obtener el aforo de otros años.
El ayuntamiento de Madrid envió una resolución, negativa, por supuesto, a todos los requerimientos pedidos por Matadero y los organizadores de RetroMadrid, la cual llegó el día 24 por la tarde, con lo que el tiempo de reacción fue nulo, siendo inevitable el caos que tuvo lugar en la primera mitad del día 26. De todas formas cualquiera puedo solucionar sus dudas y frenar su enfado leyendo el comunicado que hicieron el día 29.
Pasando a temas más dulces, y a pesar de sus problemillas, la asistencia al RetroMadrid fue superior a años anteriores, gracias a la calidad de lo ofrecido. Como siempre a lo primero que fue un servidor fue a jugar a todo lo jugable. Pese a ver en las pantallas los mismos juegos que en otras convenciones, siempre podías pedir que te dejaran probar otros, así que las posibilidades eran muchísimas al fin y al cabo. Más limitadas eran las opciones de las máquinas recreativas que pusieron, aunque eligieron muy buenos títulos, en concreto las Teenage muntant ninja turtles, que permitía jugar a cuatro jugadores simultáneamente y de forma cooperativa.
También tuvieron la oportunidad de mostrar su trabajo jóvenes creadores de juegos, pertenecientes al emergente sector de los laboratorios indie, como Dead synchronicity de Risin’Goat, una aventura gráfica de click’n point, o Phobos children de Mirai labo, que apuesta más por una mezcla entre la estrategia y el RPG, entre otros, los cuáles ya están en su mayoría disponibles, al menos en forma de demo, en sus respectivas páginas web.
La zona de merchandasing era, como siempre, enorme. En ella se podían adquirir desde llaveros, peluches, camisetas y toda clase de cosas de los héroes favoritos de cada cual, hasta consolas originales y tuneadas con el fin de adaptarlas a los televisores actuales, junto a una gran diversidad de sus respectivos juegos.
También cabe mencionar las interesantes charlas que se dieron como, por ejemplo, la charla de la historia de nuestro erizo azul favorito Sonic, los concursos, el concierto que hubo al final de la jornada del sábado y por último pero no menos importante el stand de comida y bebida que a mas de alguno nos salvaron el gaznate.
En opinión del que suscribe, a pesar de los problemas de logística, RetroMadrid volvió a ser una gran convención en la que los jugones mas «pixeleros» pudimos gozar de lo que mas nos gusta: el ambiente, las consolas y, sobre todo, de los juegos de antes… De siempre.
Un saludo y a seguir jugando.
Peri