A contracuento. La danza y las derivas del narrar

 

 

Por Violeta Nicolás.

A contracuento. La danza y las derivas del narrar

Roberto Fratini

Cuaderno de letra 4. Danza y pensamiento

2012, Mercat de les flors

 

Todo es escritura como dice nuestro escritor Mario Bellatín, y también puede serlo la danza, el cuerpo en su movimiento, en sus desplazamientos y trayectos. Nos dice el autor, Roberto Fratini, que hay un paralelismo entre narrar -el cuento- y la danza que quizá en principio nos resulta extraño, una vinculación entre ambas prácticas artísticas que nos suelen parecer tan distintas. Sin embargo el propio cuerpo es la mejor manera de decir. El libro, sin duda, es fascinante, es de los que merecen varias lecturas, y muchos post it que señalen los fragmentos que más nos han sorprendido. También hay otras partes que reafirman intuiciones que quizá nosotros también hemos tenido antes, y eso es genial. No debemos limitar el sentido de la danza, sino expandirlo hasta donde alcancemos, hasta donde nos haga más felices, hasta que se acerque más a nosotros. Aunque es un delirio la cercanía, según nos dice el autor, en sus páginas que nos sorprenden una a una, con su capacidad para relacionar y asociar ideas procedentes de diversos campos, desde la moda, la tecnología y, en especial con la literatura.

Me parece interesante el trabajo del coreógrafo y artista William Forsythe, que menciona bastante a menudo en el libro, su obra trata acerca de la coreografía de objetos y las sincronías, cómo construimos con ellos esquemas para la danza, que se refieren a las personas, sus posibles movimientos, posiciones y presencias. Compararnos con los objetos, es probablemente algo primitivo, infantil, un modo de reflejarnos y de identificarnos a través del pensamiento metafórico, con el que nos extendemos y como siempre, hablamos al final de nosotros mismos así como de las maneras de relacionarnos que tenemos los seres humanos.

El autor al hablar de OFTr (one flat thing, reproduced) de William Forsythe, un trabajo relativo a la danza que nos dice recuerda “el espíritu azaroso de la narración y de la literatura en cuanto aventura del lenguaje”, lo enlaza con aquello que decía Blanchot sobre la inspiración creativa literaria a partir de la desorientación dinámica, la agitación o el hastío. Entre otras cosas, se refiere a una cita sobre el poeta Mallarmé, “con palabras se puede hacer el silencio. pues la palabra puede también volverse vana y dar con su presencia la sensación de su propia falta. “ausencia dispersa en esta soledad”, “exquisita vacancia de si”, “blancura hueca, envoltura de nada”, todo eso es lenguaje, pero un lenguaje que, al expresar el vacío, debe al fin expresar el vacío de lenguaje”

 

 

Thematic variations on OFTr de William Forsythe

 

Roberto Fratini, nos ayuda a entender de otra manera un recurso y un tema propio de la danza contemporánea -uno de los ejemplos más recientes que he observado es el caso de Itxaso Corral- en el cual, observamos que el artista se inspira en su autobiografía, y además, presenta a través de unas palabras, una descripción e introducción de la acción que se propone a realizar, lo cual subraya la diferencia entre ambas cosas, y se establece un efecto que puede ser frustrante, algo cómico, o bien poético, al intentar extender el sentido de la palabra, y encontrar limitaciones físicas, en un diálogo que puede convertirse en extremadamente subjetivo.

“El relato del espectáculo, verbalizado en ausencia de toda actividad danzada, impregnado de humores autobiográficos, subroga la performance con su verbalizaron (…) la prolépsis es, en literatura, esa anticipación de los contenidos que puede volver inútil su exposición posterior. De forma análoga, el relato de una danza eventual o su declaración de intenciones ilustran no ya el sintagma efectivo de la danza (su literalidad ausente, remplazada por la pseudo-literalidad del cuento), sino su paradigma, la causa formal que esta no realizará; dicha causa formal, confiada a la verborrea del cuento proléptico, es propiamente mítica: cuento desarrollado en un vacío crónico entre lo que sucederá y lo que podría haber sucedido, entre balance y presupuesto. La palabra vanifica la danza que vanificaba a las palabras”.

 

 

Roberto Fratini Serafide (Milán, 1972) ha ofrecido conferencias y talleres sobre dramaturgia y filosofía de la danza en muchos festivales y universidades europeas y actualmente es profesor de Teoría de la Danza en el CSD de Barcelona. Colabora además como dramaturgo y asesor con varios coreógrafos entre Italia, Francia y España. Autor de artículos y ensayos en varias revistas del sector.

 

 

 Por Violeta Nicolás