PORQUE LA VIDA SIEMPRE VA EN SERIO. O QUIÉN LA TIENE MÁS GRANDE
Por Carmen Moreno. Me he despertado con una extraña sensación de que, quizá el destino no exista, pero hace mucho que no puedo hacer demasiado para cambiar lo que está pasando, a mí y a los que me rodean y me va pudiendo una cierta desesperanza leve, lenta, sin fuegos artificiales.
Decía Jaime Gil de Biedma:
Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
(Más tarde, cuando uno ya no se da cuenta de que perdió demasiadas risas, demasiado tiempo en averiguar por qué el que tiene a su lado tiene un coche más grande, una novia más guapa, una casa más bonita; por qué la tiene más grande).
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.
(Y dijo la vida: cuidado muchacho/a, que puedo hacerte papelillo si muevo uno de mis dedos. Vivimos sin pensar en nada que no fuera todo lo que merecíamos por el simple hecho de estar vivos, sin darnos cuenta de que la vida siempre va en serio, y en el concurso de “A ver quién la tiene más grande”, no lo olvidemos, el de nuestro lado siempre gana).
Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
(Sentirnos como en un macroconcierto, donde nos subimos al escenario y miramos al público, 10.000 personas que abarrotan un estadio, y sabemos que somos mejores que ellos, aunque nos sintamos como un montón de mierda. Oír nuestros nombres coreados por todos ellos, chicas/os desmallándose con nuestro sudor).
-envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.
(Una obra en la que no salíamos nosotros. Nosotros, que seremos inmortales más allá del fin de los tiempos).
Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
(Esa en la que te das cuenta de que, no sólo estás en esa obra, sino que eres la protagonista. Que los aplausos, que alguno te habrás llevado, no han servido para parar el tiempo que ha acabado pasándote por encima).
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.
(Lo digo por si no te das cuenta de que en esta obra, el telón caerá un día y, cuando vaya bajando lento, imparable, piensas de repente: coño, la vida iba en serio. Porque, la vida siempre va en serio, así que más te vale no estar perdiendo el tiempo. Esto no es un ensayo. Y, créeme, ella la tiene más grande).