La mujer que no quería amar. Y otras historias sobre el inconsciente
«Durante los últimos veinticinco años he trabajado como psicoanalista. He tratado a pacientes en hospitales psiquiátricos, en clínicas de psicoterapia y de psicoterapia forense, en unidades infantiles y de adolescentes, y he ejercido la práctica privada. (…) Sin embargo, la mayor parte de mi trabajo ha sido el psicoanálisis de adultos: sesiones de cincuenta minutos con una persona, cuatro o cinco veces a la semana, durante algunos años. He pasado más de cincuenta mil horas con pacientes. La sustancia de todo ese trabajo es la sustancia de este libro. Lo que sigue son episodios extraídos de la práctica diaria. Aun cuando he alterado algunos detalles en aras de la confidencialidad, me he mantenido fiel a los hechos: estas historias son verdaderas.»
Actualidad editorial:
Todos somos narradores, nos gusta elaborar historias para dar sentido a nuestras vidas. Pero no es suficiente contar historias, hace falta alguien que escuche. En su consulta, el psicoanalista Stephen Grosz lleva 25 años desvelando los sentimientos ocultos tras las acciones más sorprendentes. La mujer que no quería amar (Editorial Debate, 2014) trata de un proceso muy habitual: hablar, escuchar y comprender. Sus historias aforísticas y elegantes nos enseñan un nuevo tipo de atención. También revelan un delicado retrato del trabajo del analista, y muestran cómo las enseñanzas obtenidas en la consulta pueden significar tanto para él como para el paciente. En definitiva, nos ilustran sobre cómo nos perdemos, pero también sobre cómo nos podemos encontrar. Este no es un libro sobre psicoanálisis, son historias sobre nuestra vida cotidiana: desde la cuna hasta la muerte, las personas que queremos y las mentiras que contamos; los cambios que afrontamos y el dolor. Un destilado de más de 50.000 horas de diván, sin ninguna jerga.
A través de las sencillas historias de sus pacientes, Stephen Grosz nos señala cómo vivir. La filósofa Simone Weil cuenta cómo dos prisioneros en celdas contiguas aprenden, durante un período muy largo de tiempo, a comunicarse dando golpecitos en la pared. «El muro es la cosa que los separa, pero también es su medio de comunicación -escribe-. Cada separación es un vínculo.» Este libro trata de esa pared. Trata de nuestro deseo de hablar, de comprender y de ser comprendidos. Es también sobre escucharnos mutuamente, no solo las palabras, sino también los espacios que hay entre estas. El autor no escribe aquí sobre un proceso mágico, sino de algo que forma parte de nuestra vida cotidiana: golpeamos la pared, y escuchamos. En el New York Times comentaron que La mujer que no quería amar es como «una combinación entre Chéjov y Oliver Sacks».
Stephen Grosz es un psicoanalista que ha trabajado con pacientes durante más de 25 años. Nació en Indiana y estudió en la Universidad de California en Berkeley y en la Universidad de Oxford. Actualmente enseña en el Instituto del Psicoanálisis del University College de Londres. Sus casos han aparecido publicados en el Financial Times Weekend Magazine, en El País y en la prestigiosa revista Granta. La mujer que no quería amar es su primer libro.
La mujer que no quería amar. Stephen Grosz. Editorial Debate, 2014. 256 páginas. 17,90 €