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Parlabytes 2013 – Reunión de nostálgicos en el sur de Madrid

 

 

 

Este fin de semana, durante los días 23 y 24 de noviembre, tuvo lugar en la madrileña localidad de Parla la segunda convención del Parlabytes, la cual se celebró en la Casa de la Juventud del mismo municipio con el maravilloso coste de 0 euros, lo cual resulta más que de agradecer en los tiempos que corren.

Parlabytes 2.0 contaba con dos pequeños edificios. Uno de ellos, el de menores dimensiones, era donde se encontraba expuesta para su venta (e intercambio, si se daba la ocasión) una pequeña cantidad de juegos, algo de merchadising y un cinefórum donde se proyectaron varias películas que había programadas especialmente para la ocasión, las cuales mencionaré con más detalle dentro de unas cuantas líneas.

 

Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0
Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0

 

En el edificio principal fue donde se desplegaron la mayoría de las actividades. En sus 30 stands pudimos encontrarnos con diversas máquinas dispuestas para jugar; puestos de compra, venta e intercambio de juegos y consolas antiguas; baratijas y merchandising varios; máquinas recreativas, un bar, y un stand preparado para los concursos,  como ya hicieran también en el MadridGamesWeek dos semanas antes.

A continuación voy a detallar con más concreción todo lo que os he ido mencionando hasta ahora, que a pesar de que ha sido poco más de día y medio, el Parlabytes de este año ha sido bastante completito.

Los que estuvimos allí presentes pudimos gozar de juegos de la mítica Master System II, como Sonic the hedgehog, El libro de la selva o Super kick off, entre otros. De la Nintendo pudimos rememorar juegazos como Castlevania, Contra y el más que eterno Tetris, y un largo etcétera. El cerebro de la bestia (SNES para los menos expertos en la jerga) también tuvo representación de mano de Street fighter y Killer instinc. He de decir, que en mi opinión, podrían haber puesto juegos de otras temáticas, ya que esta consola es muy variada en este aspecto, precisamente. Para Megadrive se exhibieron juegos como el Rising star (gran juego que a pesar de su indudable calidad no consiguió, en su momento, superar a Sonic) o Sonic 3, tan venerado por muchos retrojugadores.

 

Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0
Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0

 

La muchas veces infravalorada Nintendo64 tuvo muy poca representación en Parlabytes, aunque eligieron un juego muy entretenido para que los asistentes rememoráramos buenos momentos de la máquina que introdujo el joystick en las consolas de sobremesa, el mítico Super smash bros 64.

Un punto en contra de esta convención retro fue, en mi opinión, que la zona de recreativas no fue tan explotada como podría haber sido, ya que aparte de ser muy pequeña no había juegos de gran renombre. Aunque también hay que decir que el hecho de que los juegos allí disponibles no fueran de lo mejor, eso no impidió que la gente se amontonara entorno a las máquinas e incluso se generaran colas para poder probar los mandos.

Los juegos y consolas que ya he mencionado, al igual que Amstrad CPC y Spectrum (que no se dispusieron para jugar, a diferencia de la MadridGamesWeek), sí que se podían comprar en varios de los stands, amén de sus respectivos juegos. Cabe decir que en este aspecto Parlabytes supera a la MadridGamesWeek, seguramente por su carácter exclusivamente retro.

A la venta, además de lo dicho hasta ahora, se podían encontrar también una gran variedad de consolas portátiles y juegos para las mismas, como Game gears de varios colores, un gran surtido de todas las variantes de Game boys,… y en definitiva todas aquellas maquinitas que todos hemos disfrutado alguna vez a lo largo de las últimas dos décadas.

 

Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0
Foto extraída de la página de Facebook de Parlabytes 2.0

 

También pudimos ver en vitrinas distribuidas a lo largo de toda la nave complementos como pistolas y volantes para las consolas. También vimos artilugios menos habituales como el Guante de poder para Nintendo, así como las lupas con luz para Game boy, y, en un ámbito más destinado a los retro-souvenirs, también vimos llaveros, peluches, bolsos y, obviamente, camisetas.

Otro atractivo del Parlabytes 2.0 fueron sus numerosos concursos que hicieron las delicias y las lesiones de pulgares de todos los jugones que quisieran apuntarse y batallar entre ellos machacándose en el Street, ganando carreras en el Over top, o alardeando de juego sucio en un partido de baloncesto en el Arch-Rivals.

Pero todo no va a ser videojuegos en esta vida, así que para deleite del lado más friki de los asistentes se proyectaron varias películas: “Sonic the hegdog”,  “Double dragon”, “Goemon mystical ninja” y la ova de “Ninja gaiden”, adaptaciones de unos videojuegos muy queridos y a la vez muy jugados por todos los retro-jugadores.

La Asociación ASUPIVA fue la única ponencia de la convención y tuvo como tema la historia de los videojuegos y los aspectos más interesantes de la misma. Este fue un detalle que también marcó las diferencias entre esta feria y la que tuvo lugar en IFEMA hace apenas dos semanas, ya que en la MGW abundaron las ponencias, charlas y encuentros.

Eso sí, una particularidad de cuya exclusividad puede alardear Parlabytes fue que en el evento hubo también sitio para la solidaridad. Tanto como si lo traías de tu casa, como si lo comprabas allí mismo por tan sólo un euro, podías cambiar un kilo de comida por un videojuego a elegir de una gran muestra que tenían en el correspondiente stand (si no todos ellos, al menos la inmensa mayoría, eran de PS2). La comida que se obtuviera sería destinada a los más desfavorecidos.

Voy concluyendo, diciendo que Parlabytes, en su segunda edición, ha conseguido reunir a una cantidad considerable de forofos, frikis y amantes de todos los videojuegos retro habidos y por haber, los cuales pudieron disfrutar como niños de todos sus títulos favoritos de antaño. Ha sido un evento humilde pero nada desdeñable, que de seguir por este camino se hará, sin duda, más grande cada año.

 

Un saludo y a seguir jugando.

 

Peri

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