La otra voz
Por Julio Vallejo
El dramaturgo Manuel De se acerca de manera muy original a La voz humana, la obra en un acto escrita por Jean Cocteau en 1930. En La otra voz, el extremeño convierte a la protagonista de la obra, una mujer nada intelectual, en un artista gay del siglo XXI. De esta forma, la pérdida del ser amado, tema central del texto del autor francés, se convierte en una particular performance.
Antonio, el protagonista, es un hombre al que acaba de abandonar su pareja. Dispuesto a prepararse ante el último encuentro con el que fue su amante, ensaya una y otra vez ese momento. Él imagina las palabras del que fue su novio y actúa dependiendo de las situaciones que va proponiendo. Su entrega es total, aunque sea consciente de vivir continuos ensayos de una experiencia que, como comprobaremos, nunca se producirá realmente.
Manuel De crea una atmósfera especial para mostrarnos esta particular representación del abandono del ser amado. Las fotografías en colores vivos esparcidas por el suelo nos recuerdan que Antonio y su novio fueron en un momento muy felices. Por otra parte, la proyección inicial, donde un hombre se somete a laceraciones, y la transformación final de Antonio en una suerte de cerdo plasman de manera perfecta el dolor por la ruptura desde el punto de vista de la creación artística.
Este extraño ambiente es el ideal para que asistamos a los diversos cambios de ánimo de un protagonista desolado ante la pérdida de su pareja. A lo largo de la obra, Antonio pasará por todos y cada uno de los sentimientos que puede tener una persona a la que ha abandonado su amante. Hay tristeza y reproche, pero también ternura y agradecimiento por los buenos momentos vividos.
No obstante, la obra no alcanzaría la temperatura emocional necesaria sin la entregada interpretación de Georbis Martínez, que encarna de manera muy intensa a este hombre destrozado por el abandono de su novio. El actor cubano dibuja a un personaje temperamental y apasionado que todavía quiere a su amante, aunque se muestre hundido anímicamente y no alcance a entender del todo las razones de la ruptura. Igualmente destacable es la labor de Gabriel Moreno, que presta sus cuerdas vocales a César, la pareja sentimental de Antonio. El intérprete nunca aparece en escena, pero el tono de su voz deja entrever que su personaje es una persona más racional y adulta que Antonio.
En definitiva, La otra voz se aleja de otras adaptaciones más convencionales de La voz humana, aunque sin traicionar la esencia de la obra de Jean Cocteau. Manuel De y su compañía, La Saraghina de Stalker, conservan el espíritu del drama original, aunque sean conscientes de que para ofrecer algo nuevo y distinto se tengan que distanciar de la letra del gran autor francés.
La otra voz
Basado en la obra La voz humana, de Jean Cocteau.
Texto y dirección: Manuel De.
Compañía: La Saraghina de Stalker.
Intérpretes: Georbis Martínez, Manuel Moreno.
Lugar: Sala Tú, Madrid.
Fechas: Del 4 de julio al 1 de agosto de 2013.
Horario: Todos los jueves, a las 20.30h.