Un buen final para una serie irregular

 

Por INMA GÓMEZ REYES

Smash terminó hace unas semanas dejando un buen sabor de boca a pesar de lo irregular que ha sido en cuanto a tramas. Con un capítulo doble cuya última parte recrea una gala de los premios Tony la serie tira de lo que siempre le ha funcionado muy bien, la música, para poner punto y final.

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Desde que deslumbrase a público y audiencia con su piloto hace ya dos años, Smash ha dado muchas vueltas. Tras ese primer episodio que todas las críticas catapultaron luego llegó el mayor chascazo de la temporada anterior. La serie no prometió ni cumplió las expectativas que daba el inicio de la serie y cayó en picado de público y de crítica. Luego se sucedieron un sinfín  de cambios de showrunner y de guionistas y la cadena decidió darle una segunda oportunidad para ver si mejoraba. Pero no lo consiguieron. 

Al inicio de la serie se vendía que Karen era el talento por descubrir y que ella era la Marilyn Monroe que estaban buscando los responsables del musical Bombshell aunque por físico se veía claramente que no, que la otra aspirante, Ivy era realmente a quien estaban buscando. Pero todo sea por vender el sueño americano de chica de pueblo que quiere ser artista que se va a Nueva York a conseguirlo. Karen consigue ser Marilyn y triunfar en la gira previa a la entrada de Bombshell en Broadway. En esta segunda y última temporada, se volvió a liar todo de tal modo que Karen decidió dejar el musical por el que tanto había luchado para protagonizar Hit List, una suerte de Rent, porque sus dos compositores, Jimmy y Kyle le habían impresionado enormemente. Convenció a Dereck para que lo viese y cuando éste dejó Bombshell por desavencencias con la dirección de Tom Levitt, Karen sintió que ese ya no era su musical ni su lugar y se fue a Hit List con Dereck como director. Una vez montado el segundo musical el reto era llevarlo a Broadway y ese ha sido el tramo final. Bombshell y Hit List peleando en los premios Tony.

Finalmente parece que se escucharon las voces críticas y las tramas se encauzaron considerablemente. Ivy, por fin, consiguió ser Marilyn en el muscial de Bombshell y ganó su premio Tony, además de que su relación con Dereck triunfó y él le declaró públicamente su amor. Eileen consiguió hacer que Bombshell funcionase a pesar de los mil y un quebraderos de cabeza que le daba el dinero para conseguirlo y las zancadillas que su ex marido le ponía para que no lo consiguiese.

Jimmy consiguió que Kyle ganase su Tony por Hit List que era lo que quería y aunque Karen se quedó sin premios y sin novio porque Jimmy ingresó en prisión por esa vuelta de tuerca de última hora se dio cuenta de que es buena en los suyo y seguirá luchando por conseguirlo. Tom y Julia hicieron después de haberse peleado y a lo grande, hicieron las paces. Ella consiguió los derechos de El gran Gatsby para poder hacer su musical y él esperaba dirigir otro musical en Broadway. Pero una oferta de última hora a ambos les deja la puerta abierta para ir a Hollywood ha rodar un musical.

Uno de mejores números musicales corrió a cargo del elenco del musical Hit List en el que cantan mientras tocan ritmo con sus manos en plena gala de los Tony o el número final de Ivy y Karen con el que se cierra la serie. Si algo bueno tenía la serie eran las canciones y sus números musicales,  y nos deja temas enormes como el maravilloso Let me be your star o el I heard your voice in a dream, de Hit List.

Si os gustan los musicales esta serie podría convertirse en un buen entretenimiento veraniego.

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