Kate Morton o cómo hacer un bestseller. Entrevista por "El cumpleaños secreto"
Por Benito Garrido.
Un drama familiar donde se aúnan secretos, traiciones, amores frustrados, miedos y palabras nunca pronunciadas. Una historia en la que el crimen y los estragos de la guerra abren la puerta al misterio y al peso de las conciencias intranquilas que perduran en el tiempo… Material base en el que se sustenta la escritora australiana Kate Morton para crear una novela, que como las anteriores, termine convirtiéndose en un auténtico best seller mundial. Mujer atenta, sencilla, amable, muy apegada a su familia, de sonrisa imborrable, y trato cercano, muestra con palabras que sus trabajos son el fruto de muchas horas de estudio y escritura. Morton nació en 1976 en Berri, pero creció en las montañas del noreste de Australia, en Queensland. Su literatura bebe de fuentes góticas, de aquello que mamó en sus lecturas juveniles: las hermanas Brontë, Dickens, Daphne du Maurier, Poe o Lucy Clifford, entre otros nombres de la literatura victoriana que estudió.
El cumpleaños secreto. Kate Morton. Traducción de Máximo Sáez. Editorial Suma de Letras, 2013. 690 páginas. 21,00 €
Laurel no olvidará nunca aquella calurosa tarde de verano. Comenzaban los años sesenta y ella era una adolescente enamorada que oculta en la casa del árbol fantaseaba con escaparse a Londres para estudiar interpretación. Lo que ocurrió en ese momento lo tiene grabado en la memoria: un desconocido hizo interrupción en la granja, saludó a Dorothy, su madre, y ésta tras una breve y temerosa charla le apuñaló en el pecho con el cuchillo que llevaba en la mano. Tras cincuenta años, Laurel se ha consolidado como una gran dama de la escena inglesa, pero todavía sigue abrumada por sombríos recuerdos. Aquella muerte le fue cambiando sus ideas más básicas de justicia y bondad. Ahora vuelve a la granja para pasar allí los que pueden ser quizá últimos días de su madre. Surgirán un aluvión de preguntas que ahora ya no puede frenar, y cuyas respuestas van poniendo en evidencia un complicado rompecabezas de silencios, mentiras y sueños malogrados.
Entrevista:
P.- Novela romántica de época, pero también de misterio y grandes secretos. Con El cumpleaños secreto sigues la línea narrativa de tus anteriores novelas, pero esta en concreto ¿cómo se gestó?
Como persona, y también como escritora, desde siempre he tenido la habilidad de ir dándome cuenta de ideas, de cosas que siempre he pensado me podían servir para conformar y escribir una historia. Lo que hago es coleccionar ideas o imágenes que voy escribiendo en un cuaderno conforme se me van ocurriendo. También almaceno ideas en mi cabeza, como si fuese un baúl, fragmentitos que se van acumulando en mi memoria. Luego, cuando me pongo a escribir, abro el baúl, las voy sacando, y se van uniendo. Algunas llevan incluso años almacenadas. Lo que sí necesito para escribir una novela es, al menos, tres ideas que confluyan en la historia que quiero construir. En El cumpleaños secreto esas imágenes eran claras: una niña subida en la casita de un árbol que a través de la ventana ve algo que no tendría que haber visto; una mujer corriendo desesperada por llegar a algún sitio durante la II Guerra Mundial, aunque no sé a dónde va; y la tercera idea era ese giro final de la historia que llevaba tiempo queriendo hacer.
P.- Tus novelas victorianas son tan británicas que podría pensarse que tus orígenes son más ingleses que australianos.
Australia tiene una fuerte industria y tradición literarias, pero en mi caso concreto es que yo empecé a escribir no para explorar el mundo en el que vivo, sino para ir a los lugares que tenía en mi imaginación, por jugar a mezclar el presente y el pasado, por mi pasión hacia los edificios con historia habitados durante mucho años por la misma familia, esas generaciones que van pasando… Todas esas cuestiones son muy cercanas a Gran Bretaña, más que a Australia, de ahí que me inspirara sobre todo en este país.
P.- Tus personajes no muestran ningún descuido en su evolución, están muy bien definidos. ¿Es algo clave para que la trama se sustente y configure una sólida novela?
Tener unos personajes bien creados y sólidos es algo muy importante, porque de cómo sean tus personajes va a depender el futuro de la novela. La personalidad de un personaje debe hacer creíble las decisiones que posteriormente tome, y además esas decisiones no es que vayan a ser predecibles, pero tienen que ser inevitables. Es esencial para la trama que los personajes sean verosímiles, de ahí que deban estar bien sustentados. Si la trama está bien desarrollada y los personajes bien definidos, entonces la novela funciona. A mí como lectora lo que más me gusta al terminar de leer un libro es decirme a mí misma “tenía que acabar así”, aunque sea un final triste.
P.- El pasado pesa mucho en tus novelas.
Siempre he sido una mujer nostálgica, incluso cuando era pequeña: recuerdo ver objetos antiguos y sentir esa sensación de vuelta al pasado. Mi madre era anticuaria y, cuando llegaba a casa con cajas llenas de objetos, me gustaba abrirlos y pensar “Y esto, ¿de dónde viene?¿qué vida ha vivido antes?”. Siempre me dejo llevar por la nostalgia o la melancolía. Lo que sí espero es no glorificar el pasado, no es esa mi intención.
P.- Siguiendo con el tema, es interesante ver como el pasado termina afectando a los hechos presentes. ¿Crees que es algo que ocurre de forma habitual? ¿Sientes que te ha ocurrido a tí?
Creo que más que el pasado en sí, lo que más puede interesar es su influencia en el presente. También me interesa la Historia como disciplina, pero ese pasado ya es otra mirada diferente. Coge cualquier objeto o edificio y verás que es un pasado que aún nos afecta: piensa en una vieja mansión, o en el metro de Londres… que todavía siguen siendo utilizados. Es algo que me fascina. Además, como personas, estamos condicionados genéticamente, por la familia, la educación que hemos recibido, la educación que recibieron nuestros padres, por tantas cosas… y que te voy a decir de mis novelas si precisamente esconden un secreto en el pasado.
A mí también me afectó el pasado. Si entro de lleno en él, podría contarte que El jardín olvidado está basado en un caso real de mi abuela, que desveló cuando yo ya era muy mayor. Cuando ella tenía 21 años se enteró de que su padre no era su padre biológico, y lo sintió como una vergüenza. La hizo más retraída, pues se sentía distinta de sus otras cinco hermanas. Eso conformó su carácter, su forma de ser, su personalidad, y de ahí influyó en la de su hija, mi madre, y en la mía propia. Yo estoy segura de que mi timidez viene de ahí.
P.- La relación entre madre e hija, Dorothy y Laurel, es realmente muy especial, ¿quizás es la que sustenta el eje central de la historia?
Sí, la relación entre madre e hija es esencial para la novela, sobre todo porque Laurel quiere tanto a su madre que tiene la necesidad de conocer ese misterio que oculta. Cuando era niña vio el crimen que cometió Dorothy y se convirtió en cómplice del mismo. Tiene como una espinita personal que necesita arrancarse. Los secretos entre madre e hija, incluso en la vida real, deben esclarecerse, tienen que salir a la luz.
P.- En tu libro hay un asesinato y un oscuro secreto familiar en torno al que gira la historia. Consigues mantener el misterio y la tensión narrativa hasta al final.
Conseguir eso es lo que más me satisface de la escritura. Disfruto creando personajes, los lugares, acertar con las palabras, pero no hay nada como crear la novela, mantener la tensión; eso es lo que me engancha de la escritura. Si tuviera que escribir una historia lineal, me aburriría enseguida y perdería el interés, así que cuando escribo, voy alternando textos, haciendo gráficos… por la noche es lo que me mantiene despierta intentando encajar todas las piezas de la novela, para que configuren una unidad que fluya.
Interesante . Aprendo algo con cada blog todos los días. Siempre es estimulante poder leer el contenido de otros escritores. Osaría usar algo de tu articulo en mi web, naturalmente pondré un enlace , si me lo permites. Gracias por compartir.