En Margaret Atwood, "Un día es un día"
La palabra escrita es el mecanismo más asombroso para viajar por el tiempo.
Actualidad editorial: Margaret Atwood, una de las escritoras de más prestigio internacional, vuelve al panorama literario con su nueva obra, Un día es un día (Editorial Lumen, 2013). Atwood, cuyo nombre lleva ya algunos años asociado a la posibilidad del Nobel, presenta un libro que no corresponde a ningún título publicado originalmente en inglés, sino a la voluntad de los editores por reflejar a través de una serie de relatos el recorrido vital de una mujer a lo largo de los años. La autora ha participado personalmente en la selección de relatos y ha escrito un prólogo especialmente dedicado a este volumen.
La temática de estos relatos es sobre todo doméstica. Tratan de la gente y de sus relaciones en momentos determinados, de niveles sociales específicos y de lugares determinados. (…) hay personas, y al fin y al cabo de eso hablan todas mis historias: de seres humanos que hacen cosas que hacen los seres humanos.
Una vida… muchas vidas de mujeres contadas a través del tiempo. Los doce relatos que conforman Un día es un día siguen a distintas mujeres en el devenir de los años, empezando por la infancia, siguiendo con la madurez y acabando con la vejez. Sus protagonistas se llaman a veces Betty, otras Ronette o Sally, y no podrían ser más distintas la una de la otra, pero ahí están, hablando de sí mismas y de su relación con los hombres como si fueran un cuerpo solo, que desfila por los primeros sinsabores de la adolescencia y luego camina vacilando por los años del matrimonio, de la maternidad y del divorcio, para descansar finalmente en la mirada irónica de esas espléndidas señoras de cabello blanco, que saben muy bien qué han perdido, aunque ya poco les importe porque… un día es un día, y lo que antes nos pareció capricho o locura, ahora, después de tantos años, solo merece una sonrisa piadosa.
Todos tenemos guardadas distintas versiones de nuestras vidas, aunque nos las contemos solo a nosotros mismos. Y las corregimos a medida que avanzamos.
La Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2008, abre y cierra este recorrido con dos relatos autobiográficos que hablan de sus padres, y que son todo un regalo para la inteligencia y la emoción del lector. Traducida a una treintena de idiomas, incluidos el japonés, estonio, finlandés, turco, iraní o el coreano, y aunque su bagaje literario viene de mucho más atrás, en España se la empezó a conocer sobre todo a partir de la edición de El cuento de la criada, una novela de ciencia ficción con el trasfondo de una sociedad autoritaria que obtuvo varios premios internacionales. La condición femenina, la observación o la minuciosidad son puntos clave que se advierten en su escritura. Gran ecologista y defensora de los derechos humanos, cuando ganó el Premio Booker, destinó los fondos a esa lucha.
Alguien me contó la historia de la granja de ratas almizcleras de mi abuelo: él y un tío de mi madre cercaron el pantano que se extendía detrás de su propiedad e invirtieron los ahorros de la tía soltera de mi madre en ratas almizcleras. La idea consistía en que las ratas se multiplicaran para con el tiempo emplearlas en la confección de abrigos, pero un cultivador de manzanas vecino lavó los útiles de sulfatar en el río y el veneno mató a las ratas, que quedaron tiesas como clavos. Ocurrió durante la Depresión y no se lo tomaron a la ligera.
Nacida en 1939 en Ottawa y licenciada en la Universidad de Toronto, Margaret Atwood tiene en su haber más de treinta volúmenes de poesía, numerosas colecciones de cuentos y once novelas, entre las que cabe destacar El cuento de la criada (1983), La novia ladrona (1994), Alias Grace (1996), El asesino ciego (Booker Prize 2000), Oryx y Crake (2003), la colección de ensayos titulada La maldición de Eva, y los dos volúmenes de cuentos titulados Las chicas bailarinas y Érase una vez. Actualmente la escritora vive en Toronto con su compañero, el novelista Graeme Gibson.
Un día es un día. Margaret Atwood. Traducido por A. Palomas, V. Pozanco y E. Murillo. Editorial Lumen, 2013. 352 páginas. 19,90 €