Barceló, la reinvención de la materia

Por Paloma Rodera. 

 

Galería Elvira González

Calle General Castaños, 3. Madrid.  

Hasta el 27 de marzo.

 

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La galería Elvira González, situada en el barrio de la Justicia de Madrid, ofrece hasta el próximo 27 de marzo, una pequeña muestra de piezas realizadas por el artista Miquel Barceló durante el año 2012. La exposición está compuesta por una serie de vasijas de cerámica en las que hay un estudio de la arcilla como pintura y una profunda reflexión entorno al propio material. La procedencia de la materia prima, del propio estudio del artista, antigua fábrica de ladrillos, elabo

Es interesante el planteamiento que nos lanza el artista, cuando se refiere  a la interrelación de las disciplinas, que pueden ser usadas de manera conmutativa. “El tema de muchas de estas obras es la pintura. La arcilla se convierte en pintura, en lienzo y dibujo. Para abreviar, una transmutación. La arcilla se convierte en pintura y así en carne de nuevo.”ra una línea de pensamiento en Barceló en referencia a la Historia de los ancestros y su vigencia a través del barro encontrado; una forma de cocción tradicional a fuego, que funde, que crea algo nuevo y como el propio Barceló confiesa de esta manera, sin una cocción eléctrica “se recogen todos los defectos y las imperfecciones”; y un análisis de la situación en la que se encuentra el litoral español, abarrotado de construcciones a pie de playa. El desastre del Sur de Europa.

 

Barceló, nacido en Mallorca en 1957, de familia de artistas se dará a conocer con importantes premios desde los 24 años. Ha sido representante en 1986 de España en el Pabellón de la Bienal de Venecia. Su obra ha sido expuesta en la Whitechapel de Londres, en el Centro Georges Pompidou y el Museo Louvre de París. Ha sido galardonado con el premio Príncipe de Asturias de las Artes en 2003. En 2008 inaugura la cúpula de la Sala XX del Palacio de las Naciones Unidas de Ginebra.

 

Para un artista que trasladó su sede a Mali por un tiempo, la temática relativa a la raíz, su fascinación por África, se deja entrever, bajo mi punto de vista, en este trabajo que nos ofrece Elvira González. Hay un referente claro en esta época, que ahora se expresa en la refundición, en la utilización de lo antiguo para la creación de lo nuevo. Una deconstrucción de concepto de los materiales empleados (ladrillos, tejas, azulejos) para la construcción de obras de arte con una nueva identidad y otro mensaje.

 

La exposición nos muestra otro trabajo de este polifacético artista, que sin duda, y como él mismo nos dice: “En el arte (en la pintura) uno reflexiona antes o después, pero nunca durante”.

 

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