Arranca ‘L’Hora del Jazz’
Por Ana M. Caballero
Los domingos de septiembre suenan a jazz en Barcelona. Bajo un sol de mediodía algo plomizo, el pasado día 9 arrancó de nuevo ‘L’Hora del Jazz’. El festival en memoria de Tete Montoliu inauguró su 22ª edición con la banda Gemini Bonell-Gaspar-Blavia Trio, que presentó un jazz con ciertos timbres mediterráneos, sin dejar de lado atrevimientos más rockeros. A continuación, David Soler ofreció una arriesgada sesión de cross-over jazz.
El concierto inaugural daba el pistoletazo de salida a la programación diurna del festival, que se prolongará los tres primeros domingos del mes en la Plaza de la Vila de Gràcia, además de una sesión extra el día 16 en Vilafranca del Penedès. Las actuaciones, que tienen lugar en pleno espacio público, son gratuitas; es la forma de acercar el jazz «a personas que nunca irían a un club» declara Dick Them, que ocupa el cargo de vicepresidente de la Associació de Músics de Jazz de Catalunya (AMJM), la entidad organizadora del festival.
Sin poder disimular su pasión por este género, Them explica que ‘L’Hora del Jazz’ promueve que los no aficionados «vean el concierto y vean que el jazz no es aburrido, que es una música viva, rica, con mucha sensibilidad y muy creativa. Querríamos que cuando acabe el festival, estas personas vayan a ver jazz a los clubs que hay en Barcelona, en Cataluña y en el resto del mundo». Entre concierto y concierto, los niños corretean por la plaza, en cambio, más de un centenar de personas continua sentada frente al escenario, «la reacción en general es buenísima, la gente se sienta y no se mueve, eso ya es un baremo, si no se levantan y se van quiere decir que lo están pasando bien» considera el vicepresidente de la asociación.
Otra de las finalidades del festival es recuperar la memoria de Tete Montoliu, el primer jazzman español que tuvo éxito internacionalmente. Ciego de nacimiento, el pianista se convirtió en un referente para su generación y revolucionó la escena del jazz catalán. Subió al escenario con los mejores del género, incluso el vibrafonista Lionel Hampton quedó impresionado con su figura. Dick Them cuenta que «Tete tenía un lenguaje especial, muchos músicos afroamericanos que tocaban con él decían que swingueaba como un negro, el concepto swinguear» aclara Them «sería como el duende del flamenco».
Tanto los músicos ya consagrados como los más jóvenes admiran a Tete; quizás por ello, tocar bajo su nombre, en su memoria, despierta cierta emotividad en los conciertos de ‘L’Hora del Jazz’. Este año el festival ha recogido unas setenta propuestas de entre los socios. El vicepresidente aclara que «miramos que haya de todos los estilos y todas las edades, desde veteranos a estudiantes que acaban de acabar sus carreras, que haya un abanico representativo de todos los estilos, desde clásicos a modernos y, por supuesto, fusionados». El resultado es una amalgama de sonoridades excepcional.
Además de las actuaciones de los domingos al mediodía, el festival ha programado para este mes cinco conciertos nocturnos en diferentes clubes y salas de Barcelona y Vilafranca del Penedés. El grupo Dácil se encargará de abrir la programación de sala en el club Jamboree, un habitual del festival, y del jazz en sí. Joan Vidal Sextet, Gorka Benítez y David Xirgu, con su proyecto A marte otra vez, o Ignasi Terraza Trio serán algunos de los nombres que suenen esta edición. Una edición que marca «un antes y un después» ya que según el presidente de la AMJM, Max Sunyer, la situación no puede ser peor, «seguimos con la supresión de conciertos del último año: un domingo en la Plaza de la Vila de Gràcia y dos noches en club». Pese a la crisis en el sector, ‘L’Hora del Jazz’ sigue fiel a sus principios y apuesta por un espacio para la música moderna y el jazz, pero, sobre todo, un espacio para los músicos que hay detrás y siguen la estela de Tete Montoliu.
Más información | Associació de Músics de Jazz i Música Moderna de Catalunya.