Los mercenarios 2 (2012) de Simon West
Por Iñaki Rodríguez
Mucha gente va al cine a pasar un buen rato y olvidarse un poquito de las piedras que la vida les va poniendo por el camino y con las que en algunas ocasiones tropiezan. Al fin y al cabo, una parte del objetivo del cine como arte es el entretenimiento.
Y aquí nos agarramos nosotros, al entretenimiento. Porque si lo que busca un amante de las películas de acción es olvidarse un poco de la ciudad medio vacía, o de unas quemaduras en la playa por no usar una protección solar adecuada, o de ser el único que trabaja mientras los demás se toman copas en los chiringuitos, o de que de los niños no dejen de dar la lata en todo el día con que quieren bajar a la piscina, o del insoportable calor, o del plasta de al lado que se empeña en echarte crema o simplemente de lo “bien” que le va al país, Stallone y su grupo de amigos pueden conseguirlo.
Los Mercenarios 2 lo tiene todo: humor, parodia, tensión, grandilocuencia, nostalgia…, incluso el guión es tan simple que no hace que te despistes haciéndote pensar en estúpidas cavilaciones y que pierdas un solo fotograma de toda la acción que han preparado para ti. Para el amante de la acción.
Un entretenimiento que no se engaña a sí mismo y que no engaña al espectador porque ofrece lo que promete: casi dos horas pegado al asiento disfrutando palomitas y recordando lo feliz que era uno con quince años viendo a sus héroes acabar con los villanos después de fuegos de artificio.
Es cierto que los principales iconos del cine de acción de los 80 no están ni para levantar una pobre escopeta de papel celofán, que ni siquiera se ve a Chuck Norris soltar una de sus famosas patadas voladoras, ni Van Damme está para demasiadas florituras. Schwarzenegger está tan decrépito que moriría aplastado por la espada de Conan, y un combate de boxeo entre Stallone y Lundgren terminaría con implantes de prótesis de caderas. Pero esas nimiedades no hacen que la acción desfallezca porque han sabido rodearse de grandes nombres del presente y del futuro cine de acción. Statham, el incombustible e inimitable Jet Li, Crews (junto con Lundgren tiene los mejores puntos humorísticos del film) y el futuro dios del ring y de las “action films”: Scott Adkins (si queréis comprobar lo qué es capaz de hacer este inglés de 36 años, ved Ninja o Invicto 3 , os quedaréis ojipláticos).
Han sido 100 millones de dólares de presupuesto, casi todo gastado en botox, pero con el resto han sabido crear un ambiente en el que te sumerges hasta el punto de creerlo real. Claro, que para hacerte volver de ese sueño de “realidad” ya están las viejas glorias con sus sentencias al mejor estilo de los spaghetti western de Sergio Leone y con las que consiguen que el cine ría a carcajadas, como cuando aparece el inmutable “Lobo Solitario”.
Si quieres disfrutar con los amig@s de la infancia como cuando veías Acorralado, Comando, Contacto Sangriento, Desaparecido en combate, Jungla de cristal, Little Tokyo…, no te puedes perder esta película.
Si eres un amante del cine independiente de Suazilandia y cosas por el estilo, hay otras salas que te pueden ayudar mejor a conciliar el sueño.
Los mercenarios 2 (2012) de Simon West se estrenó en España el 24 de agosto de 2012
Muy buena crítica, por fin alguien hace críticas que entendemos los lectores y de cosas que nos interesan a los lectores. Estoy de acuerdo en lo de Scot Atkins, es de lejos el mejor. Tenían que haberlo expoltado más en la película.