Encuentro con José Luis Sampedro y Carlos Berzosa: «La inflación»
Por Benito Garrido.
“La inflación (al alcance de los ministros)”, este es el completo y significativo título del libro de José Luis Sampedro, que revisado por Carlos Berzosa, relanza ahora la editorial Debate.
“Hoy en día que se está dando más importancia a la economía financiera que a la productiva, que la situación empieza a ser insostenible y que vuelven a tener destacado papel términos como inflación, no basta con buscar responsabilidades en el sistema político para justificar la crisis”, apunta el economista y escritor José Luis Sampedro, quien recupera estos últimos días un título, La inflación (al alcance de los ministros) que ya en 1978, cuando fue publicado por primera vez, tuvo un importante alcance. Con la colaboración del catedrático Carlos Berzosa, que actualiza y revisa la obra, se reedita un estudio que visto hoy, sigue teniendo total vigencia.
Sampedro señala que el dinero debe estar al servicio del trabajo para que se productivo, para que la economía satisfaga las necesidades materiales de las personas. Sin embargo hoy estamos en manos de adoradores del dinero. “Todos tendríamos que contribuir a que el poder del dinero desaparezca, y recuperar los valores de la sociedad occidental que hoy se están desintegrando”. El autor procura con este libro, mostrar al ciudadano lo que la ciencia económica oficial prefiere ignorar o enmascarar sobre el tema. Por su parte, Berzosa repasa la historia de la inflación desde que fue controlada en los noventa y analiza el porqué de su vuelta y a qué intereses beneficia su retorno
La inflación es la gran obra de Sampedro sobre el tema, ahora revisada y actualizada. La inflación, un fantasma que parecía controlado, vuelve a estar en boca de todos, ya que es la excusa en la que se escudan las autoridades económicas y financieras para adoptar políticas restrictivas que asfixian aun más las débiles señales de crecimiento. En su ya clásico estudio, Sampedro, uno de los economistas más respetados de España, diseccionaba la inflación y la hacía comprensible para el gran público. Además, frente a la ortodoxia de la teoría económica, exponía una visión mucho más crítica en la que la inflación era una herramienta fundamental del sistema.
Los beneficios se han desplazado del sistema productivo al financiero, los salarios se han moderado, las productividades se han concentrado entre los ricos… Las desigualdades sociales han aumentado. Se están produciendo muchos sacrificios para compensar el capitalismo sin control que se ha estado aplicando por parte de ciertos organismos. “Insuflar dinero a los bancos lo que hace es incrementar las riquezas de los más adinerados”, comenta el economista convencido de que el problema de la crisis está marcado principalmente por la economía financiera, que es la que los gobiernos saben manejar mejor. “Los gobernantes tienen miedo, pero también tienen poder, y en lugar de alimentar el sistema productivo, rellenan las arcas del sistema financiero”. Es el juego del dinero que busca dinero: lo más fácil y controlable para ellos, cuando realmente lo que deberían estar buscando es la productividad del sistema.
Según Sampedro, en este mundo hay dos tipos de economistas: los que pretenden que los ricos sean más ricos y los otros que buscan hacer que los pobres sean menos pobres. Está claro que el mercado no se puede dejar en libertad total, pues es entonces cuando surgen los mayores desequilibrios y las más duras injusticias. Ante la cuestión de si son los políticos responsables de la actual situación, Sampedro manifiesta que todos somos responsables, que los políticos han sido elegidos por el pueblo, y por tanto, existe también una responsabilidad por parte de los ciudadanos. Hay que pensar más que nunca, lo que uno personalmente decide votar.
Berzosa considera que hay una crisis de modelo de desarrollo, y que para intentar solucionarla se debería apostar por eliminar las agencias de calificación y los paraísos fiscales, poner coto a los mercados financieros y crear un sistema fiscal más progresivo, sobre todo en una economía como la nuestra donde no hay impuestos fiscales sobre las grandes fortunas.
Ya para terminar, Sampedro pidió a los medios aclarar un polémico tema, y es que la famosa carta que se está difundiendo en internet y por las redes sociales, en la que en nombre del autor se proferían insultos al presidente y los ministros, no ha sido escrita por él.
José Luis Sampedro (Barcelona, 1917) es uno de los escritores e intelectuales más queridos y respetados de este país. Ha vivido en Tánger, Aranjuez, Melilla, Santander o Tenerife y actualmente divide sus días entre Madrid y Málaga. Es catedrático jubilado de Estructura Económica, escritor y miembro de la Real Academia Española y ante todo, un hombre moral y comprometido con el mundo que le ha tocado vivir, algo que demuestra en todas y cada una de sus obras, ya sean ensayos sobre economía y sociedad como El mercado y la globalización, Economía humanista, Conciencia del subdesarrollo o Las fuerzas económicas de nuestro tiempo; o novelas como La sonrisa etrusca, La vieja sirena o La senda del drago. En marzo de 2011 le fue merecidamente entregada la Orden de las Artes y las Letras de España «por su sobresaliente trayectoria literaria y por su pensamiento comprometido con los problemas de su tiempo».
Carlos Berzosa (Madrid, 1945) es catedrático de Economía Aplicada. Fue rector de la Universidad Complutense de Madrid entre 2003 y 2011, tras ser decano los catorce años anteriores en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales. Colaborador frecuente en medios de comunicación, formó parte del consejo editorial del diario El Sol, colaboró en los servicios informativos de la Cadena SER, fue tertuliano comentarista en Onda Cero y colaborador en el semanario El Siglo. También es presidente de la Fundación General de la UCM, miembro del consejo de redacción de la Revista de Economía Mundial (REM) y director de la publicación Revista de Economía Crítica.
La inflación (al alcance de los ministros). José Luis Sampedro / Carlos Berzosa. Editorial Debate, 2012. 236 páginas. 18,90 €