“Break it yourself” de Andrew Bird

 

Por Cristina Consuegra.

Break it yourself

Andrew Bird

Bella Union/Music as usual

Marzo, 2012

 

 En cierto modo, Noble Beast (2009) ya iluminaba el camino por el que transita Break it yourself, séptimo álbum de estudio –contando Useless creatures (2010), reflejo natural de Noble Beast– del compositor estadounidense, Andrew Bird. En este nuevo trabajo, Bird  libera un buen puñado de canciones que guardan relación directa con el dolor, la soledad y la belleza… mejor dicho, canciones que nacen de estados de ánimo que precisan de esos tres concentos vitales.

 

Producido por él mismo y grabado en tan sólo una semana al abrigo de un granero en Illinois, fomentando, buscando, la complicidad y el instinto de los músicos, Andrew Bird ha lanzado un álbum que ha dejado a medio planeta hipnotizado. La imagen de la portada del álbum pertenece a la familia del artista, en ella aparece su propia abuela cuando tenía 6 años, en 1915, en casa de unos familiares en Missouri.

 

Desde el corte número uno, “Desperation breeds…”, fotografía poética, el de Chicago ya nos deja bien clara la intención de este álbum: capturar la vida, arrinconarla a golpe de melodía. Aprehender el mundo gracias a la música. “Danse Carribe”, diluye el álbum en una especie de estilo que bien podría ser etiquetado de calipso folk. Sin embargo, hay que esperar a la canción número cinco para llegar a uno de los primeros grandes momentos del álbum, “Eyeoneye”, origen y fin último de Break it yourself. Primera canción que Andrew Bird escribe para este trabajo, canción que surge en las noches de insomnio y que reflexiona sobre el dolor propio y ajeno, sobre la emoción propia e impuesta. Otro de los grandes instantes de este trabajo aparece de la mano de Annie Clark (St. Vincent), con quien Bird canta en “Lusitania” que junto con “Fatal Shore” son dos canciones basadas en hechos históricos y que buscan hacer reflexionar al espectador sonoro sobre la naturaleza humana. “Sifters” es posiblemente el tema más introspectivo y contemplativo del álbum, bueno, con permiso de “Belles”, una canción instrumental para la noche y sus circunstancias –puede que el canto de los grillos ayude a dibujar ese paisaje-, canción despedida… o bienvenida. Según se mire, según se oiga.

 

Escucha Break it yourself de Andrew Bird en Spotify

 

Concierto de Andrew Bird

Martes 12 de junio

Teatro Circo Price

Heinken Music Selector