Time Magnagement Argentina. Entrevista a Marcela Sinclair
Por Jana Pacheco.
«Intento habilitar para cada usuario un tiempo similar al tiempo del arte. El arte puede ser una cualidad temporal. Ayudo a mi público a organizar su tiempo para que pueda ser más autónoma, creativo y feliz»
Marcela Sinclair estudió Bellas Artes en el I.U.N.A (Buenos Aires), pero pronto se alejó del mundo de las artes visuales para dedicarse a la docencia y la música. En 2005 retomó la creación artística y desde 2009 ha recuperado temas pedagógicos para incorporarlos a su obra. Su objetivo es llevar a cabo proyectos de investigación donde el público quede incorporado en su trabajo.
En Cali, como artista residencial en Lugar a Dudas realizó el proyecto Tardes desbordadas, en el que un grupo de personas fueron invitadas para bordar una fecha importante de su país. El objetivo fue compartir una práctica artística en un tiempo concreto. La experiencia resultó tan enriquecedora que Marcela Sinclair decidió embarcarse en nuevos proyectos, donde presenta el arte como una cualidad temporal.
Desde 2010, Marcela Sinclair está realizando un proyecto en LA ENE , el Nuevo Museo de Energía de Arte Contemporáneo en Buenos Aires. La artista pretende ayudar al público a organizar su tiempo induciéndole a tener un modo de vida donde la felicidad sea el principal objetivo. Compara el tiempo libre con el tiempo del arte, considerándolo “un tiempo sin sentido cerrado”. Para este proyecto ha creado Time Management Argentina, donde recibe a su público de forma personalizada ayudándole a elaborar una agenda donde “incluso el contratiempo tiene cabida”.
– ¿Cómo se inicia este proyecto?
El inicio del proyecto nace de la necesidad de organizar mi tiempo personal. Cuando empecé a desarrollar esta tarea me pareció buena idea ayudar a los demás a poder organizar su tiempo.
– De dónde viene el nombre de Time Magnagement?
El nombre viene del management empresario. Me cuestioné si mantenerlo o no porque éste es un proyecto artístico, no un curso ni un coaching tradicional. La idea del proyecto es que exceda el mundo del arte. Mantuve el nombre de Time Magnagement porque utilizo herramientas comunes con esta actividad aunque la experiencia sea distinta.
– ¿Crees que verdaderamente ayudas a los demás a organizarse?
Lo que ayuda es compartir la experiencia con el otro. Es el problema de los manuales de autoayuda o las clases magistrales. Sus consejos, aún con el déficit de ser muy generales, pueden resultar útiles, pero luego cada uno queda en su casa con la sóla herramienta de su voluntad para modificar conductas quizás muy arraigadas. No es tarea fácil. Yo trabajo de acompañante en ese proceso. Además intento habilitar para cada usuario un tiempo similar al tiempo del arte. El arte puede ser una cualidad temporal. Ayudo a mi público a organizar su tiempo para que pueda ser más autónomo, creativo y feliz.
– ¿Cuál es la aparte de este proyecto que tú consideras más artística?
La obra de arte es lo que te llevas a casa, ya sea una sensación o una imagen y ese efecto debería durar para toda la vida. El tiempo en el arte es necesario. La entrevista es unipersonal y cambia y modifica tu vida como una obra de arte. El tiempo libre y el contratiempo son dos momentos de ruptura, son los huecos por donde actuar.
– ¿Cómo se comercializa un proyecto artístico de estas características?
El tema económico ha sido otro punto de investigación. Este proyecto apunta a buscar una relación con el dinero que no es la más común en el mundo del arte. La gente compra bonos cuando acuden a las visitas, el precio es variable según la estimación del cliente. Tengo bonos contribución desde 10 hasta 100 pesos argentinos, (1’50 hasta 17´50 euros), y se pueden comprar tantos como quieras en cada entrevista. El caminar en el borde de lo que es arte y no lo es, es uno de los aspectos que más me interesan del proyecto.
– ¿Cómo se inicia una entrevista con el público de tu obra?
Yo inicio una serie de preguntas como: ¿cuál es tu fantasía de satisfacción en cuanto a la organización del tiempo?, o ¿qué entiendes por tiempo libre?; y a partir de ahí hacemos algunos ejercicios y vamos construyendo una agenda semanal, mensual, de proyecto, anual o lo que el consultante necesite.
– ¿En las diferentes entrevistas consigues ver evoluciones en tu público?
Sí, principalmente una mayor autoconciencia en lo que al uso del tiempo respecta. La importancia de momentos y actividades consideradas como “pérdida de tiempo”. Reconocimiento de ritmos personales. Modificación de hábitos insatisfactorios. Y liberación de tiempo: se abren huecos en las agendas, para hacer una actividad deseada o como espacios de puro presente, sin contenido previsto, disponibles para la improvisación.
– ¿Cuándo se pone punto y final en un proyecto que está basado en la actividad temporal?
De acuerdo a mi propio sistema de organización temporal, este proyecto terminará cuando sienta que llegué a un punto de no interrogación, de agotamiento. O cuando esté tan trasformado que ya no pueda entenderse como el mismo.
– Tu proyecto estuvo expuesto en el Centro Cultural de de España en Buenos Aires. ¿Has conseguido llegar a un número mayor de público?
¡Sí! La Ene presentó mi proyecto para concursar por el uso del escaparate del CCEBA durante un mes. Era una buena oportunidad de tener publicidad en calle (El Centro está en la peatonal Florida, una zona muy transitada). Convertí la vidriera en la de un local de Time Management, con plotters y un video explicando el servicio que ofrece la empresa. El día de la apertura dos vendedores estuvieron repartiendo folletos a los transeúntes.
– ¿Qué queda de esta obra?
El material de esta obra es el tiempo vital de sus usuarios. Al público le queda la experiencia. El resto material son los bonos contribución, huella de que ha sido participe de la obra. Por otra parte estoy elaborando el material que voy recogiendo en las entrevistas, con visitas a una publicación que relate mi experiencia.