Gabriela Rosas

Quién es, quisiera usted saber, Gabriela Rosas

Aarón García Peña para “Puntos de vista” de Radio Exterior de España
(segunda estampa)

 

En Caracas, Venezuela, empujada por su abuela Josefina desde el fondo del río Tíber, ha vuelto a apasionarse la poeta Gabriela Rosas. Fue casi descriptible, a punto de partir en dos América. Y así, al término del aire que se queda a soñar en los pulmones, con ese mojado autocontrol de una cerilla en manos de los niños y cinco versos por cada cicatriz que fue guardando por las nubes, Gabriela Rosas volvió a la vida de un modo que jamás nadie hubo hecho.

 

Desde España pudimos ver cómo su libro, de nombre “La Mudanza”, fue el primero en salir a flote; y cómo, “a fuego lento”, en dos mil ocho, nueve años más inteligente, nueve vueltas a la Tierra secándose el agüilla del oído, puso en órbita su precioso poemario “Agosto interminable”.

 

De carácter noble, de cariño fácil e intimismo que intimida, Gabriela Rosas es poeta por prudente, mujer después que humana, sudor antes que carne. Seguro que, algún día, aparece en Madrid —Alberto, Ana—, para besaros en la frente con esas jovencísimas arrugas que tiene cuando piensa en broma lo seria que es la vida. Seguro que sus versos semiaislados, convalecientes a golpes de verdad y un vaivén de creencias que ni Dios soportaría; dará —lo prometido es deuda—, a los hombres y mujeres de Venezuela una hoja rotunda de su enorme historia.

 

Gabriela Rosas: poeta, feliz inconsolable, tan sola y agrupada.

 

Lanzas una piedra,

luego otra.

Tus párpados luchan en el borde de mi boca.

Colocas tenedores en la almohada,

agua caliente en los rincones,

cintas negras para atarme a tu cuerpo.

 

La oreja es derecha para escucharte.

 

Las palabras, cuando es tarde, ya no tienen ventaja.

 

Para escucharlo en la radio: http://www.rtve.es/alacarta/audios/puntos-de-vista/puntos-vista-25-11-11/1261741/