"El tiempo de la igualdad", Jacques Rancière
El tiempo de la igualdad. Diálogos sobre política y estética. Jacques Rancière. Herder, 2011, 312 pp., 24,90 €.
Las entrevistas de este libro fueron realizadas entre 1981 y 2007 y despliegan todas las cuestiones que con el paso de los años, se han revelado como fundamentales en el pensamiento de Jacques Rancière.
Rancière expresa un rechazo total frente a esa costumbre política cada vez más consolidada que consiste en confiar la solución de los problemas comunes a “expertos” para que tomen decisiones “objetivas”. Rancière pone de relieve dos presupuestos de esta expertización de los asuntos comunes: de entrada, la expertización implica la creencia en la posibilidad de determinar una situación dada “objetiva” que, supuestamente solo puede ser definida por personas cualificadas; además, con la expertización de lo común, se está negando la capacidad que tiene cualquiera de asumir, participar y decidir sobre esos asuntos comunes que le afectan.
Así, la expertización de lo político es una costumbre antiigualitaria y uno de los males endémicos de nuestras sociedades, cuya extirpación reclaman con fuerza los recientes movimientos sociales (en las plazas, por las calles, en escuelas y universidades).
La noción de igualdad en Rancière no designa de ningún modo un proceso que homogeneiza a los individuos. La interpretación de Tancière remite más bien a la igualdad de inteligencias y a la propia capacidad que tiene cualquiera de hablar y ocuparse de asuntos comunes.
Política y estética se anudan de una manera crítica, dejando de lado los acercamientos temáticos en los que el arte político es, simplemente, el arte que trata temas políticos o sus modos de representación. El régimen estético del arte es el lugar en el que puede emerger un espacio de indeterminación que permite abrir la posibilidad para un nuevo reparto de lo sensible, en oposición a los órdenes representativos que funcionan a partir de un modelo de distribución clara y jerárquica de las voces y los cuerpos.