Entrevista con Paul Pen.
Por Julio Hurtado Martín.
Si hay algo en lo que coincide la mayor parte de la crítica internacional es en que ‘El aviso’, trabajo debut del genial escritor madrileño Paul Pen, es uno de las mejores novelas negras del año. Toda una sorpresa y una soplo de aire fresco dentro de un género necesitado de nuevos talentos, especialmente a nivel nacional. Una obra sólida, brillante y vivaz. Ecos de Stephen King y del Noir más puro se dan la mano en un sorprendente trabajo que te engancha desde la primera página. Recientemente estuvimos con él y esto fue lo que nos contó.
Acabas de publicar tu primera novela, ‘El aviso’, la cual ha tenido una excelente recepción por parte de la crítica, tanto nacional como internacional. ¿Cómo fue el proceso de composición del libro?
Lo más importante fue tomar la decisión de hacerlo. Después sólo hay que dedicarle tiempo. Soy de los que planifica mucho antes de escribir, así que comencé teniendo muy claros el comienzo y el final de la historia, además de toda la estructura que tendría la novela. Los números me ayudan mucho para todo: calculé el número de palabras que quería, el número de capítulos y el número de fines de semana que tendría que dedicarle. Todo muy psicópata.
Se nota que has mamado de la vieja escuela, de nombres como James Ellroy o Raymond Chandler. ¿Cuáles han sido tus principales referencias a la hora de escribir esta novela?
Diría que he tenido más referencias cinematógraficas o televisivas que literarias. Concebí la novela como una serie de veinticuatro capítulos, y cuidé mucho que todos terminaran con un buen cliffhanger. En general, los escritores norteamericanos saben muy bien cómo hacerlo, y de ellos Harlan Coben y Dennis Lehane me gustan especialmente. Aunque es algo que también se aprende viendo Melrose Place o Perdidos.
¿Quiénes son tus escritores actuales favoritos? ¿Una recomendación a nivel nacional?
Ahora mismo estoy descubriendo (tarde, lo sé) a Ray Bradbury, y estoy alucinando con las imágenes tan potentes que consigue con dos palabras bien puestas. Leer un libro suyo de relatos es como ver un álbum de fotos inquietante y mágico. En el ámbito nacional me gusta como fenómeno el repunte de literatura zombie de Manel Loureiro o Carlos Sisí.
¿Por qué has elegido un género tan trillado y difícil como la novela negra para tu primer trabajo?
En realidad yo quería escribir una novela de terror, pero finalmente quedó menos terrorífica y más de suspense. En cualquier caso no fue una elección: disfruto tanto los libros de Stephen King y Robert McCammon que me gustaría que un libro mío pudiera hacer sentir algo parecido a lo que consiguen ellos.
Cuando uno lee el libro se da cuenta que hay un cierto poso cinematográfico. ¿Fue algo premeditado el dotar a la narrativa de la novela de ésta característica?
Es algo totalmente buscado. De hecho a veces creo que escribo la película que me gustaría dirigir. Pero como me veo incapaz de sacar adelante un proyecto tan organizado como el de un rodaje, lo hago a solas frente al ordenador de mi casa. Así yo mismo soy el guionista, el director de fotografía, el responable de cásting y el encargado de los efectos especiales.
Si tuvieras que elegir un director y un actor para llevar tu libro a la gran pantalla. ¿Cual sería tu elección?
Ahora mismo en España tenemos un montón de buenos directores de suspense. Creo que J. A. Bayona, Jaume Collet Serra o los hermanos Pastor harían un peliculón adaptando El Aviso. El protagonista principal es un niño y, en ese caso, la mejor elección es siempre uno desconocido.
También sorprende el uso de géneros tan dispares a la hora de afrontar una trabajo de género como éste. Incluso se podría decir que hay algo de Stephen King en tu obra. ¿Tal vez lo próximo será un relato de ciencia-Ficción o Terror?
Es más que probable. Para mí los mayores referentes del relato son Roald Dahl y los episodios de ‘Historias de la cripta’, así que no me quedaré tranquilo hasta que haya escrito unas cuantas historias inquietantes con final sorprendente.
Vienes de la prensa escrita. Has colaborado con medios como FHM o Zero. ¿Te habías planteado anteriormente escribir una novela?
Era un proyecto que sabía que llevaría a cabo en algún momento. Fue al acercarme a los treinta cuando me sobrevino el clásico ‘ahora o nunca’. El ‘ahora’ duró un año, pero lo conseguí.
Se tiende a desprestigiar a los articulistas. ¿Es realmente tan complicado escribir una buena novela?
Creo que todo lo que sea escribir sirve de entrenamiento. Si has estado ocho años escribiendo crítica musical y haciendo entrevistas a personajes para prensa, eso que te llevas. Estoy convencido de que incluso jugar a la aplicación Typing Maniac de Facebook sirve para mejorar tu escritura.
¿En qué estás trabajando ahora? ¿Te planteas una segunda novela próximamente?
Estoy en ello. Es una historia que me fascina y que comparte elementos con ‘El Aviso’ aunque de estructura más sencilla. Una lucha de la luz contra la oscuridad.