Mr. Cohen, Hallellujah
Por Chus Sanesteban Iglesias
El poeta y cantante canadiense Leonard Cohen ( 1) recibirá hoy en el Teatro Campoamor el Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2011. Esta 31ª edición, que comenzará a las 18:10h. y tendrá una duración aproximada de una hora y diez minutos, cuenta con un aliciente extra. Los músicos Leonard Cohen (premio Príncipe de Asturias de las Letras) y Riccardo Muti (príncipe de las Artes) no leerán un discurso, como es habitual, sino que improvisarán.
El jurado concedió el galardón a Cohen por saber contar la vida «como una balada interminable» y por haber creado «un imaginario sentimental» en el que se funden la poesía y la música.
Cohen, asistió este miércoles en el Teatro Jovellanos de Gijón a un concierto-homenaje en el que fue el protagonista absoluto sin necesidad de salir al escenario. En el festival destacaron músicos y repertorio.
Porque a las canciones a las que fueron dando salida el irlandés Glen Hansard con de Famous blue raincoat; el flamenco Duquende , versionando My gipsy’s wife, de Cohen, y estremecedora La nana del caballo grande, de Lorca y el trío gijonés compuesto por Nacho Vegas y sus coristas Montse Álvarez, de Nosötrash, y Mar Álvarez, de Pauline en la Playa, hubo que unir las intervenciones de Andrés Amorós, que dio lectura a varios textos de Cohen (entre ellos, el magnífico Sisters of mercy) y de Laura García Lorca, cuyo apellido lleva décadas ligado al universo coheniano.
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=kWtWE-VHfRk[/youtube]
La nota política del acto vino de la mano de Nacho Vegas cuando dijo al premiado: “Igual estos días tiene que estrecharles la mano a algunos de los que mataron a Lorca.”
Y ahí estaremos, aplaudiendo a Leonard. Hallellujah.
(1) Poeta, novelista y cantante canadiense nacido en Montreal en 1934.
A los 21 años, tras obtener la Licenciatura en Literatura Inglesa por la Universidad McGill de Montreal, publicó su primer libro de poemas, «Let Us Compare Mythologies», en el que deja entrever la influencia que han dejado en él las religiones católica y judía.
Su obra posterior incluye temas de sexo, amor, religión y política, marcando en todas el espíritu rebelde que siempre le ha acompañado y su personalidad depresiva. De esta época son las siguientes obras: «Flores para Hitler» en 1964, «La Caja de Especias de la Tierra» en 1965, «Parásitos del Paraíso» en 1966, «La Energía de los Esclavos» en 1969 y sus novelas «El Juego Favorito» y «Los Hermosos Vencidos».
En 1990, agobiado por el inconformismo, decidió ordenarse como monje de la religión Zen. En 1999, después de casi nueve años en el monte Baldy, abandonó los hábitos para dedicarse de nuevo a la música y la poesía.