Entrevista a Chema García Ibarra, premiado en Sundance y ÉCU 2011
Por Alejandro Contreras.
Fotografías: Chema García Ibarra.
El 24 de abril del 2009, la noche del estreno de Pagafantas (2009) en el 12FMCE (Festival de Málaga de Cine Español 2009) y justo después de la gala donde se premiaba al inmenso Nacho Vigalondo, se proyectaba el primer cortometraje de Chema García Ibarra. Para aquellos que vivimos esa gala pudimos comprobar como ese cortometraje tenía tanta comicidad como los guiones de Borja Cobeaga y dosis de ciencia ficción existencialista como el primer largometraje de Vigalondo, Los Cronocrímenes (2007). No es de extrañar que este El ataque de los robots de Nebulosa-5 (2008) tuviera un recorrido tan triunfal ya que varios meses antes había conseguido una mención especial en Sundance 2009 que le había conseguido abrir las puertas a muchos otros festivales y a otros premios incluyendo el Méliès d’Or al mejor corto de cine fantástico europeo..
Su segundo cortometraje, Protopartículas (2009) no se ha quedado atrás. Tras volver a conseguir una mención especial del jurado en Sundance 2011, ha conseguido una infinidad de premios en festivales de medio mundo incluyendo En.piezas 2011 (Madrid), San Diego Latino Film Festival 2011 o Festival de Cine de Tarapacá 2011 (Chile), e incluso una mención en el ÉCU 2011 (Festival de Cine Europeo Independiente) celebrado en París el pasado mes de abril.
Con este comienzo tan prometedor nos acercamos al director Chema García Ibarra para conocer sus impresiones sobre sus cortometrajes (más en concreto por el último), la repercusión que han tenido gracias a los premios en los distintos festivales y en concreto tras las menciones de honor obtenidas en los festivales independientes Sundance 2009/2011 y en ÉCU 2011.
SOBRE PROTOPARTÍCULAS (2009)
CulturamasCine: Comencemos hablando de Protopartículas (2009). ¿De dónde nace la idea de este cortometraje?
Chema García Ibarra: Fue una iniciativa de Foc Cinema, el festival de cine de Moncofa dirigido por Eduardo Guillot. Me propuso coproducir un cortometraje y yo tenía la idea de Protopartículas (2009), aunque aún no del todo definida. Ese interés me animó a concretarla en un guión que rodamos en los meses de verano del año 2009.
C.C.: Tras el éxito de El ataque de los robots de nebulosa-5 (2008) y sus numerosos premios en otros festivales, ¿condicionó esto a la hora de escribir el guión o dirigir Protopartículas (2009)?
C.G.I.: Creo que no demasiado. Las limitaciones que tengo como director siguen ahí: la cámara no se mueve, ocurren pocas cosas, hay una atmósfera reposada… Puede parecer un «estilo», pero en realidad es que no sé hacer las cosas de otra manera.
C.C.: En Protopartículas (2009) se consigue un equilibrio exquisito entre comedia y drama, entre realidad y ciencia ficción, que es admirable. ¿Costó mucho conseguir esto? ¿Crees que podría dar pie a un largometraje?
C.G.I.: Esa combinación de conceptos opuestos es ahora mismo lo que más me interesa y en lo que voy a seguir trabajando. Hay una línea en algún sitio equidistante entre la comedia y el drama, entre lo cósmico y lo cotidiano; ahí es dónde veo cosas muy interesantes y por explorar. Desde luego intentaré que esa convivencia de mundos opuestos esté presente en ese hipotético y lejano primer largometraje.
C.C.: De los numerosos premios de Protopartículas (2009), ¿de cuál te sientes más orgulloso?
Bueno, la Mención en Sundance 2011 fue una gran alegría y un momento muy emocionante. Pero todos los premios me han alegrado por igual y me siento muy agradecido. Destacaría, además, los premios en Albacete y Granada, porque son festivales que creo que comparten mi forma de entender las películas.
EL PANORAMA ACTUAL DEL CORTOMETRAJE
C.C.: Para muchos el cortometraje es un gran instrumento para que jóvenes cineastas comiencen en el mundo del cine. ¿Qué haría falta para que el cortometraje no fuera visto como un medio sino como un fin?
C.G.I.: Hay tantas formas de ver el cortometraje como cortometrajistas. En mi caso, no tengo intención de construir una filmografía, sino de explorar ideas concretas. La única forma de que, como dices, el corto no sea visto como medio sino como fin, sería que los directores alternaran los largos y cortos sin complejos, que el tiempo que dura una película lo determine la propia historia, no una convención.
C.C.: Aparte de los festivales, apenas se puede ver cortometrajes en un cine o en televisión. ¿Qué opinión te merecen iniciativas como las que proponen que los gobiernos apoyen la difusión de los cortometrajes incluyendo uno de ellos en cada proyección de un largometraje en una sala de cine? ¿De qué otra forma se podría apoyar al mundo del cortometraje?
C.G.I.: El circuito de festivales, hoy por hoy, es la única salida para los cortometrajes. Afortunadamente en España hay cientos; hay ciudades como Elche, donde vivo, que hasta tienen dos festivales. El otro apoyo viene por parte de algunas televisiones. Acceder a los cines es complicado.
PROTOPARTÍCULAS (2009) y ÉCU 2011
C.C.: ¿Cómo os ponéis en conocimiento del festival ÉCU? ¿Qué os anima a presentaros?
C.G.I.: Tenía noticias del festival porque en pocos años se ha convertido en un evento bastante reconocido. Los cortometrajes viven en los festivales, así que presento los mío a todos los certámenes que puedo.
C.C.: ¿Qué tal fue la experiencia como participante en ÉCU 2011?
C.G.I.: Me temo que no pude estar físicamente en el festival, así que mi conocimiento del ambiente se limita a los vídeos que he visto en la web… Desde luego lamenté mucho no poder estar.
C.C.:Al ser un festival internacional con gente de distintos países y de distintas lenguas, ¿piensas que el competir con una producción en español puede ser un inconveniente?
C.G.I.: En absoluto. El cortometraje español, hasta donde yo sé, está muy bien valorado internacionalmente. Desde hace años los cortos españoles han participado y ganado en los principales festivales de cine del mundo.
C.C.:Muchas ciudades están presentando festivales de cine en búsqueda de promoción y turismo al atraer celebridades, en cambio en un festival de cine independiente no hay esos atractivos. ¿Piensas que hay mejor cine en festivales de corte independiente?
C.G.I.: No sé si las películas son «mejores», pero desde luego son los festivales y películas que más me interesan y más disfruto. Los festivales de cine independiente juegan con unos valores diferentes al glamour y las celebridades y atraen a un tipo distinto de gente.
C.C.: Protopartículas (2009) ha conseguido una mención de honor en el prestigioso festival de cine independiente de Sundance 2011. ¿En qué se parece a ÉCU 2011 y en qué se diferencia más? ¿Pensáis que ÉCU podrá tener el recorrido que ha tenido Sundance?
C.G.I.: Sundance es una enormidad, un conglomerado de secciones paralelas, decenas de lugares de proyección, miles y miles de asistentes… Hacen falta muchos años y mucha voluntad para llegar ahí. Lo importante como festival es tener una identidad propia y definida, evitar hacer bruscos cambios de objetivos que dan la impresión de no tener claro dónde se quiere llegar. ÉCU tiene a su favor celebrarse en una ciudad preciosa, accesible y atractiva. Con ganas, determinación y una identidad clara se puede tener ese largo recorrido.
C.C.: ¿Qué os supuso obtener una mención especial del jurado de ÉCU 2011?
C.G.I.: Que de repente se despertara mucho interés hacia nuestro trabajo por parte de otros festivales, productoras, medios de comunicación…
C.C.: Para cerrar esta entrevista nos gustaría saber una última cosa, ¿qué le dirías a otros cineastas que se plantean competir en el próximo ÉCU 2012?
C.G.I.: Que saquen a su corto de casa y lo manden a tantos festivales como puedan, ¡por supuesto también a ÉCU 2012!