I Festival Internacional de Fado.
Por María Anaya
Fotografía de Julio Ulanga
Los Teatros del Canal acogen los tres conciertos que enmarcan este festival acompañado por una exposición, charlas y la proyección de películas centradas en el mundo del Fado portugués.
El I Festival Internacional de Fado lleva a Madrid a los fadistas Carmo Carminho, Cuca Roseta y Carlos do Carmo. Los cantantes actuarán sucesivamente el viernes 17, sábado 18 y domingo 19, conformando el plato fuerte de este festival. Como actividades complementarias, el Festival ofrece charlas, un workshop de guitarra portuguesa, proyección de películas sobre el mundo del Fado, una exposición y la degustación de platos propios de la gastronomía portuguesa en el restaurante del Teatro.
Esta mañana Cuca Roseta nos ha convencido de la necesidad de que españoles y portugueses empiecen a mirarse de frente y dejen de darse la espalda, no le han hecho falta más que dos canciones. La belleza de su voz ha envuelto el vacío de varios pisos de altura en la entrada de los Teatros de Canal, donde ha tenido lugar la rueda de prensa.
El Fado, como el Flamenco, es una música que se comprende sin necesidad de entender el idioma. El I Festival Internacional de Fado pretende abrir un camino que lleve a este arte hasta el reconocimiento como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad en primer lugar, y al estrechamiento de culturas en segundo. España era la primera parada necesaria en este camino, por la cercanía geográfica, por ese mirar para otro lado de ambos países durante tanto tiempo. Pero pronto le seguirán otros países donde el Fado ya cuenta con admiradores, como Japón; o donde la comunidad portuguesa es amplia, como Francia.
En esta primera edición la dirección del Festival (privado, aunque finalmente instituciones públicas hayan decidido colaborar), nos propone tres maneras de entender la canción del Fado muy distintas. Por un lado nos proponen a Carlos do Carmo, el mayor representante del Fado tradicional con muchas décadas de dedicación y el precedente de su madre, la fadista Lucilia do Carmo. Por otro lado, las jóvenes Carmo Carminho y Cuca Roseta, que representan a una nueva generación en la que los jóvenes portugueses vuelven a sentir un profundo interés por la canción tradicional de su país.
A pesar de que en la actualidad el Fado tiende hacia la fusión con muchos otros estilos, los conciertos de este Festival se centran en aquellos fadistas que ofrecen un repertorio más clásico, aunque también homenajea a la gran Amália Rodrigues, quien revolucionó el Fado a mediados del siglo XX.
La película Fados, de Carlos Saura, será una de las proyectadas durante este fin de semana. La mirada del cineasta español hacia el arte musical portugués es una buena guía para adentrarse en ese mundo de ritmos que, por otro lado, exigen ser escuchados en directo. La oportunidad está servida este fin de semana.
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http://festivalfadomadrid.blogspot.com