Pokémon Blanco y Negro: La quinta generación

Por Daniel García.

Desde 1996 que se creó la franquicia de videojuegos Pokémon, los “monstruos de bolsillo” se han convertido en todo un exponente cultural con series, películas, cartas e incluso artículos de vestir; poca gente desconoce lo que es Pokémon (hasta mi abuela los conoce): es la segunda franquicia de videojuegos más rentable del mundo detrás de la de Super Mario.  Con Blanco y Negro y sus 155 nuevos pokémon inauguramos la quinta generación, elevamos el número máximo a 649, visitamos la nueva región de Teselia, enfrentándonos al Equipo Plasma en nuestro ascenso para convertirnos en el Campeón de la región.

Blanco y Negro continúa la fórmula de las anteriores ediciones sin aportar nada demasiado innovador al sistema de juego. Como regla general los juegos de la saga pocas veces incluían demasiadas novedades y se limitaban a perfeccionar el sistema con pequeños retoques e innovaciones generalmente enfocados a los que quieran disfrutar del juego competitivo. En esta ocasión la historia sigue el mismo patrón: comenzamos eligiendo entre uno de los tres nuevos pokémon de inicio (una vez más de los tipos fuego, agua y planta) y arrancamos nuestra aventura por las distintas ciudades de Teselia en busca de las ocho medallas de gimnasio.

Las más importante novedad de su sistema de combates viene en forma de tres contra tres en la que pelearemos contra tres pokémon al mismo tiempo usando nuestros tres principales. La otra forma de pelea también requiere tres pokémon al mismo tiempo por cada bando, pero no permanecen  los tres accesibles todo el rato, cada turno podemos elegir rotar el campo de batalla para cambiar el pokémon que tenemos enfrentándose a nuestro oponente a la vez que hace un ataque. Luego en combates contra otros jugadores nos dan con Blanco y Negro la posibilidad de utilizar objetos mediante un nuevo sistema que se va cargando a medida que van pasando los turnos y pide una cierta cantidad de carga(dependiendo del objeto a usar) para lanzar ese objeto a nuestro pokemon, esto cambiará radicalmente el sistema de lucha ya que en anteriores ediciones no permitían el uso de objetos.

La quinta generación ha introducido el concepto de las estaciones como ya se hizo con el concepto del día y la noche en la segunda. Los entornos variaran dependiendo de la estación y en ocasiones hasta algunos pokémon variaran su forma. Aparte de esto, Pokémon: Blanco y Negro mejora las conexiones online y por infrarrojos facilitando intercambios, combates y las relaciones entre jugadores lo cual se agradece ya que es un juego que sin interacción puede llegar a cojear.

Cabe destacar la historia principal de los ahora adolescentes protagonistas que se topan con un equipo de idealistas en busca de la liberación de los pokémon de la esclavitud que ejercen sobre ellos los humanos. El equipo Plasma, como se hacen llamar, se distinguen de los anteriores enemigos porque en esta ocasión están aspirando a una misión noble y buena pero que sigue chocando con la realidad del mundo pokémon. Es curioso cómo han optado por tratar el tema de la esclavitud pokémon en unas ediciones que han bautizado como Blanco y Negro. De todas maneras se observa en esta quinta generación como han destinado los juegos a un mercado ligeramente más adolescente que los anteriores, es obvio que los fans de la saga se están haciendo mayores.

Lo mejor:

– Los nuevos estilos de pelea que le dan más profundidad al juego.
– Mejoras en el sistema de conexión a internet e infrarrojos.
– Gráficos mejorados de los combates además de la utilización de vídeos e imágenes animadas durante el juego que se agradecen.

Lo peor:

– De las generaciones de pokemon más aburridas hasta la fecha, salvo sendas excepciones las nuevas especies dejan que desear.
– Una historia a la altura de la saga pero objetivamente algo floja de todas maneras.
– Sigue siendo un juego considerablemente infantil.

Nota 8.0: Quinta generación de Pokémon, si os gusta la saga os gustará. Si nunca la habéis probado, Blanco y Negro es un buen sitio por donde empezar a investigar este enorme mundo y sus habitantes.