Una cosa que es, de Robert Lax
Por Alberto García-Teresa.
Una cosa que es
Robert Lax
Este volumen recoge poemas inéditos escritos por el autor estadounidense durante los años setenta, aunque se editaron en 1997; tres años antes de su muerte.
Lo primero que llama la atención del volumen es el aspecto visual de los textos. Formalmente, en esta poesía destaca la disposición de los versos de la mitad de los poemas del tomo. Estos se agrupan por sílabas («grupos verticales de sílabas», según dicta el autor), con lo que se crea un ritmo especial, entrecortado, jadeante, que señala ansiedad e indecisión en la expresión. Se presenta, por tanto, un extremo del minimalismo lírico, con la reducción métrica a esos conjuntos de fonemas.
Esa búsqueda de las capacidades expresivas del componente fonético del poema le lleva también a utilizar continuas repeticiones de palabras y sintagmas. Se crea de este modo una cadencia similar a la oración. Además, los continuos paralelismos y repeticiones contribuyen a remarcar ese singularísimo ritmo. Así, pretende plasmar «un desenredo, lento y paciente de la propia canción interna y eterna del alma». Igualmente, se logra un componente visual muy llamativo.
Con ello, Lax elabora una poesía metafísica, que busca la fusión de todos los elementos que componen la realidad: la vida y la muerte, la vigilia y el sueño, o incluso proclama la desaparición del tiempo (que es un continuo que elimina el pasado y el presente) y de los espacios y sus distancias: «to / do / a / quí / es / tá / a / quí // to / do / en / ton / ces / es / tá / a / ho / ra».
Mediante esta unión de opuestos, explorados a través de constantes paradojas, se plasma en Una cosa que es esa concepción integrada de la realidad, que busca lo esencial en la vida; una visión de ecos taoístas.
Por otro lado, aparecen muchos elementos naturales (especialmente el mar, cuya presencia es predominante en los versos del libro), sobre los que la voz del poema se vuelca. Así, más que una poesía deshumanizada hallamos una poesía renaturalizada, pues esa penetración en la naturaleza se lleva a cabo en busca de esa integración total.
Finalmente, hay que destacar el documentado y documentador prólogo del traductor, Guillermo López Gallego, que explica vida y obra de este inquieto poeta con resultados muy iluminadores.
Una cosa que es
Robert Lax
Trad.: Guillermo López Gallego
Edición bilingüe
152 páginas
Quálea, 2009
ISBN: 978-84-936909-4-6