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Entrevista al bailaor Fran Vílchez

“No me imagino mi vida sin bailar”

Por Carmen Fernández Etreros.

 

El madrileño teatro Arlequín sorprende este mes con la puesta en escena de un espectáculo Temple Flamenco. Cinco bailarines y una sucesión de palos flamencos que  recorren la habanera, el tango, la bulería, el martinete, la alegría y el fandango. Charlamos por la tarde con el artífice de esta sorpresa del panorama del invierno cultural madrileño, el bailarín y bailaor Fran Vilchez, cuya trayectoria nace de una sólida formación por maestros como Mario Maya, Manolete, Miguel Medina o Luís de Luís, y su trabajo como primer bailarín en la compañía de Rafael Amargo con  espectáculos como Amor brujo, Don Quijote o Poeta en Nueva York y en otras compañías como las de  Mario Maya,  Rafael Aguilar o Juan Manuel Carrillo.

P. ¿De dónde viene esa afición al flamenco?

R. Siempre en mi familia ha habido afición al flamenco. Mi padre es un guitarrista que no pudo dedicarse a la profesión porque tenía que trabajar, y no pudo aprender todo le que le hubiese gustado. Mi padre tenía esta espina clavada… Aunque nadie se dedicaba a ello había mucha afición en mi casa. Por eso cuando me propusieron como actividad hacer karate o baile, enseguida me apoyaron y comencé en una academia del pueblo. Luego ya en el conservatorio todo lo que aprendí me enriqueció y me dio una buena base para el flamenco.

P. Entonces llevas bailando desde pequeño, ¿qué es para ti el flamenco?

R. Es algo muy fácil y muy difícil de definir. Para mí no es una música, un baile sino es una forma de vivir. Nuestra manera de vivir.

P. ¿Cuáles son tus grandes inspiraciones?

R. Para hacer un espectáculo me inspira cualquier momento de la vida, cualquier problema, todo te vale para hacer una especie de guión de la obra. De una cosa pequeña puedes hacer un mundo. De cualquier pequeño detalle te puede salir una gran obra…

P. ¿Qué momento de tu trayectoria recuerdas como el más destacado?

R. He vivido muy buenos momentos y podía mejor hablar de épocas de giro en mi trayectoria. La celebración de los diez años de la compañía de Amargo en la que había 22 bailes y yo hacía 17 y ver ese Liceo iluminado y los cuatro días sin entradas. El Liceo siempre será un sitio que recordaré. 

P. ¿Qué opinas de los nuevos caminos experimentales en el flamenco?

R. Soy partidario de la innovación y el desarrollo en todos los campos pero sin perder la base, la raíz tanto del flamenco como de cualquier otro tipo de música.

P.   ¿Qué ha supuesto para ti la puesta en marcha en el Teatro Arlequín de Temple Flamenco?

R. El espectáculo fue primero un encargo pero se ha convertido en una experiencia tremenda… Todo el mundo me comenta «qué bonito y qué sencillo” y lo que les ha gustado el espectáculo y yo siento que lo dicen de corazón. Ha sido una forma además de juntar gente, ya que cada uno de los que componen el equipo de Temple Flamenco son de su padre y de su madre… Ha sido importante sentirnos cómodos y disfrutar.

P. Un año triste sin embargo, por el fallecimiento reciente de Enrique Morente…

R. El jueves pasado le dediqué el espectáculo. Sólo dije “maestro para ti”, pero en el patio de butacas todo el mundo sabía a quién me refería.

P. ¿Cuál serían tus proyectos futuros?

 R. Seguir bailando y llevar mis ideas a cabo. Por tonterías quizás hay cosas que no he hecho antes y ahora tengo siempre muchas ideas. Mi cabeza está siempre maquinando… Por ahora en marzo en Granada estrenaré otro espectáculo.

 

Temple Flamenco / Compañía de Flamenco Fran Vílchez

Teatro Arlequín-Madrid

Todo el mes de diciembre

Lunes y miércoles 18 h. / Jueves a las 22.30 h.

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