Ser Grande
Por Enrique Gutiérrez Llamas (texto) / Fotografías de Pablo Álvarez.
Ser Grande no es cuestión de apellidos.
Ser Grande es escribir un libro sobre un episodio inexistente de la historia reciente de este país, un episodio que todo el mundo olvidó porque a nadie le convenía recordar, y que venga un superviviente a decirte:
– Lo que tú cuentas pasó así. Justo como lo cuentas tú.
Y eso es lo que le ha pasado a Almudena Grandes con un proyecto tan Galdosiano como arriesgado y veraz. Juntar realidad y ficción en unas novelas donde el tiempo condicional matice lo que ocurrió y lo que no ocurrió, lo que es verdad de lo que ha salido de su cabeza. Unos episodios que ella intenta vincular “salvando las distancias” a los de Don Benito Pérez Galdós.
La madrileña se enfrentó a las preguntas de sus lectores: su modo de trabajar, la fuente inspiradora de la novela, quienes son sus primeros lectores “Sin embargo no solo fue salpicada por la literatura. También tuvo que mojarse sobre el Sáhara y sobre los polémicos cambios que ha realizado la Real Academia. “A mí ya me dolió que le quitaran la tilde a fe, cuando la tengo que escribir así, sin tilde me parece que es ya un descreimiento total el que tengo.” Quizá la última pregunta llegó de la última fila donde se le preguntó si la envidia literaria existía. Dejo en manos del lector imaginar la respuesta.
En resumen, que el sábado 13 a las cuatro de la tarde el público pudo encontrarse con una de las escritoras más consagradas y que más oportunidades da a su público para acercarse a ella. Porque ser cercano es cuestión de ser grande.