Tempus Fugit de Javier Ruescas
Tempus Fugit, Ladrones de almas, de Javier Ruescas. Madrid, Alfaguara, 2010. 296 pp., 14.50€.
Por Carmen Fernández Etreros.
La última y tercera novela de Javier Ruescas, tras las dos entregas de los Cuentos de Bereth, nos enfrenta a una novela sobre futuros imaginarios, una de las tendencias de la novela juvenil actual. En la novela el autor crea un mundo diferente al nuestro oscuro y triste al que ha llegado la humanidad por no haber logrado conservar el planeta en el pasado. En un momento de la novela Hannah se pregunta cómo hemos llegado a esta situación: “Supongo que una vez que ya no quedaba más mundo que destruir, tuvimos que convertirnos en héroes e intentar salvar todo lo que se pudiera”.
Pero también un mundo tecnológicamente avanzado en el que el tiempo es uno de los grandes valores y en el que se intenta ahorrar lo posible en tareas de la vida diaria como alimentarse o moverse. En la novela los hombres se trasladan con gran rapidez con “las cabinas de teleporte.” Un invento que les permite suplir las carreteras, que ocupaban un espacio necesario para los altos edificios.
Todo tiene un precio y una empresa Tempus Fugit domina el mundo gracias al invento de las cabinas de teleporte. Pero detrás de estos avances hay más, mucho más… Los humanos comienzan a preocuparse cuando una temible Plaga deja en una especie de coma a varios de sus ciudadanos de manera inexplicable. Todo cambiará cuando Hannah una joven estrafalaria se choca en su bicicleta con Pablo un chico que viene de tiempos remotos, de la Edad Media. Kleid, mitad humano mitad máquina, será el encargado de resolver para Tempus Fugit este inexplicable traspaso de la línea del tiempo…
Una novela original, emocionante, sin fisuras, con una trama bien construida (siempre que el lector acepte que se trata de ciencia ficción), el tiempo como protagonista indiscutible (¿Cuánto vale? ¿Cuánto cuesta?) y con un valor añadido para este tipo de novelas: el personaje de Kleid, un protovidente, que cambia y evoluciona a medida que va avanzando la novela. Sus sentimientos y necesidades van cambiando a medida que conoce a los dos chicos y el autor sabe muy bien como transformarlos y convertirlos en una prioridad para el lector. Su yo humano se debate con las obligaciones de su yo máquina. También una historia de amistad, amor juvenil y compañerismo en la que sólo la fuerza de los sentimientos podrá ayudar a los protagonistas a sobrevivir e intentar cambiar su futuro.
Una novela con la que podemos decir que Javier Ruescas ha dejado de ser una promesa de la literatura juvenil, para convertirse en un autor prometedor de literatura juvenil. Una novela además que da un toque de atención sobre el futuro posible si los humanos no cuidamos el planeta.
¡Hola!, esta novela no tiene nada que ver con las dos anteriores del autor, ¿verdad? ¿Se puede leer de forma independiente?
Hola Carmen:
Efectivamente no tiene nada que ver con las otras dos novelas de Javier Ruescas. Puedes consultar también en su web http://www.javierruescas.com . Gracias por seguirnos