Buscando vinilos por Madrid
Por Diego Puicercús.
Con bastante frecuencia me preguntan donde se pueden comprar vinilos en Madrid. Hace unos años, cuando me sobraba el tiempo para dedicar tardes enteras a buscar discos, me costaba mucho más recomendar que sitios visitar. Por un lado había varias zonas con bastantes tiendas (por ejemplo cuando existía Madrid-rock, en la GranVía, en menos de 200 metros se encontraban al menos seis o siete), por otro las más interesantes estaban desperdigadas y si se iba con prisa se perdía mucho tiempo yendo de un lado a otro. Todo ha cambiado mucho en los diez últimos años y, entre que muchísimas han desaparecido y que normalmente sólo dispongo de un par de horas para esos menesteres cuando bajo a Madrid, me ha tocado reducir al mínimo mi ruta del vinilo.
Empieza en la calle Costanilla de los Ángeles (metro Opera) donde se encuentran seguidas dos de mis tiendas favoritas, “Bangla Desh” (1) y “Discos Babel” (2). En la primera lo mas interesante son los singles y CD-singles promocionales pero también merece la pena su apartado de música española (de la movida en adelante) y la internacional de los años 60, 70 y 80. Se pueden encontrar vinilos en buen estado de artistas de primera línea desde 10 euros aunque a veces los precios están por encima de su valor.
Pared con pared se está “Discos Babel” que creo que es más completa en cuanto a variedad. Los precios están ajustados, y si bien es cierto que no suelen encontrarse chollos, tampoco tienes la sensación de estar pagando más de la cuenta. Las secciones están bastante bien estructuradas, trabajan estilos minoritarios y además tienen novedades y venden fundas. En el debe diré que su apartado nacional es flojo y que los bootlegs (lo mismo sucede en “Bangla Desh”) son muy caros.
En una bocacalle de esta se encuentra la calle de las Conchas y allí “Rock and roll circus” (3). Está especializada en rock de todo tipo y sobre todo en música americana de los 60. Tienen bastante material de importación y se encuentran discos y grupos de esos que nunca encontrarías en grandes almacenes conviviendo en perfecta armonía con los clásicos. Los discos suelen estar en perfecto estado pero es un poquito más cara que las anteriores.
Mas adelante, en la calle de las Navas de Tolosa esta “Escridiscos” (4), con mucha variedad de música independiente española y power pop. Fue la tienda de la movida y es de las pocas que distribuyen a casi todos los sellos pequeños y vende entradas para conciertos de sus artistas, aunque a mi no me acaba de convencer. Últimamente ha ganado peso el vinilo frente al CD y de vez en cuando tiene cosas interesantes pero los altos precios suelen echarme atrás a la hora de comprar allí.
“La Gramola” (5), en la calle Postigo de San Martín, tiene bastante vinilos pero, en general, están (y esa es una apreciación personal) demasiado usados. La relación calidad precio es mala y, aunque se puede encontrar auténticas rarezas, no siempre merece la pena dejarse la pasta allí. Es la más incómoda para buscar ya que gran parte de los discos están en cajas y si no estas con ganas de agacharte lo más fácil es pasarla de largo.
Por fin en la plaza de las Descalzas, en la galería comercial del parking,
encontramos “La Metralleta” (6). Sin duda es la que más material tiene, aunque el inevitable desorden la hace inabarcable. Hay que tener mucho tiempo y paciencia y, como en la anterior, las carpetas suelen estar regular. Los precios no están mal y puedes encontrar de todo pero pegan la etiqueta de los precios directamente sobre la carpeta así que si no tienes mucho cuidado al quitarla la puedes estropear. Alguno de los discos
más curiosos de mi colección han salido de allí.
El interés de las dos tiendas que “Yunke Discos” (7) tiene en la calle Hileras y en calle Arenal no está en los vinilos, ya que tienen pocos y están destrozados. Lo que realmente merece la pena es que se pueden encontrar muchas de las novedades en CD que otros sitios cuestan 18 euros por apenas 10. El resto suelen estar a 6 o menos pero, como no siguen ningún tipo de orden a la hora de colocarlos (en realidad amontonan CD’s), ir con una idea preconcebida de lo que se quiere comprar es inútil.
Es apenas medio kilómetro en el que el placer de sentir que ha pasado por tus manos toda la historia de la música está garantizado… Y si además te llevas a tu casa un disco bajo el brazo, mejor.
Interesante entrevista con Miles Cleret, un tío que se patea Africa Occidental, America Latína y Caribe para buscar vinilos. Una pasada.
http://www.viceland.com/blogs/es/2010/07/05/antropologia-del-vinilo/
El viernes pase el enlace a mi novio ayer sabado salio a comprar discos y esta mañana me ha dado las gracias hasta terminar exausto… Os debo una… Mejor dicho tres…