CríticasPoesía

Homorragias

 

homorragiasHomorragias

Javier García Moreno

 

48 páginas

Babilonia, 2012

ISBN: 978-84-939909-2-3

 

Por Alberto García-Teresa

 

Este cuadernillo agrupa treinta y cinco piezas que constituyen el primer poemario de Javier García Moreno. En él se encuentra una diversidad de registros que pone de manifiesto a un poeta buscando su voz. Así, podemos encontrar juegos experimentales que desmenuzan las sílabas de las palabras, a las que el autor dota a cada una de ellas de un significado propio, como construcción autónoma, que se suma al significado de la palabra a la cual pertenece. Estas, además, se encadenan siguiendo reglas fónicas, no semánticas o discursivas, con lo que producen una ruptura total con la construcción tradicional del poema, puesto que este es dirigido por una impresión irracionalista, azarosa, no encaminada hacia ningún sentido. Para ello, emplea la negrita y las mayúsculas en esa redistribución léxica.

 

Otras veces, utiliza un registro conversacional, o emplea parámetros narrativos. A su vez, en algunos poemas, emplea la larga enumeración y los paralelismos para mantener el ritmo (así realiza retratos exhaustivos). En otros, por su parte, busca la concisión.

 

Javier García Moreno ofrece una poesía de profunda raíz humanista, que busca la pureza de lo sencillo, que denuncia el maltrato, la injusticia, el odio, la tortura. En ese sentido, el título de la obra resulta sumamente expresivo: esas heridas del ser humano. Así, suele esgrimir un tono de denuncia muy severo con la sociedad de consumo, con la insatisfacción permanente que genera, y que une el poeta a la deshumanización: «Hace mucho frío, // abrácese quien pueda». Por tanto, el contacto humano aparece como una herramienta de resistencia. Al respecto, se encuentra un anhelo de esperanza a pesar de la desolación, y, en el fondo, su obra constituye una proclamación de amor y de fraternidad. De este modo, desarrolla una poesía movida por un impulso libertario, desacralizador.

 

A su vez, en sus textos aparecen personas humildes, trabajadores, y se incluyen expresiones populares y jerga. Igualmente, el libro incluye algunos poemas de amor, deliciosos. Por su parte, agrupa Homorragias piezas ligadas a acontecimientos históricos específicos, aunque extrae el autor lecturas globales de nuestro mundo (como las protestas de los estudiantes de instituto valencianos de la primavera de 2012). Además, recoge también elementos de la naturaleza, como apoyo para enunciados de mayor lirismo, para la construcción de sus metáforas.

 

En suma, Homorragias resulta un buen primer poemario, que abre varias puertas por las que la obra de Javier García Moreno podría avanzar.

 

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